lunes, 2 de julio de 2012

Clase 17: Entre el psicoanálisis y la neurobiología, el futuro de las ciencias de la mente.





Psicoanalistas, trabajamos un año en cruces con las neurobiologías de este comienzo del siglo XXI
Sergio Rodríguez: -…los últimos Mohicanos para la última clase.
Empiezo ahora, porque la clase me salió un poco larga... Lo que me valió las críticas de la Señora Lueiro, pero preferí dejarla así porque me parece que el trabajo ha sido realmente muy interesante durante el año, que pudimos armar algunas conclusiones bastante interesantes, y que entonces bueno, se la bancarán, después les va a llegar por correo.
Por la longitud  de la clase les pido que no me interrumpan. También voy a suspender una poesía que había puesto de epígrafe, pero que va a ir en la desgrabación, para ahorrar tiempo. Y así nos queda tiempo para después conversar al final.
Les recuerdo a los que tengan ganas, que nos reunimos en el restaurante después a la salida de acá a comer, masticar algunos bocaditos y festejar.
También les recuerdo, que les debe haber llegado la invitación, para el 12 de diciembre, en mi casa, si tienen ganas, están todos invitados. Y les adelanto que con el Doctor Roberto Rosler estamos en conversaciones para armar un grupo de investigación sobre el cruce entre neurobiología y psicoanálisis. Si alguna de las personas que está acá o en el seminario virtual le interesa, les pido que le avisen a Laura o a Silvia o a Eva, así los incluimos en una lista. Yo quedé con él, que el traería algunos neurobiólogos y yo llevaría algunos psicoanalistas y haremos un protocolo de investigación… Inclusive, tengo la idea de cual puede ser el tema de cruce a investigar pero no se los voy a decir hasta después de la clase, porque la clase les va a dar una idea de por qué en todo caso.
Epígrafe. Dedicado a Rodolfo Iuorno, muerto demasiado joven, y que nos hizo conocer esta poesía, a “los de la Escuela de Psicoanálisis del Borda” allá por 1990


ÍTACA

Si vas a emprender el viaje hacia Ítaca,
pide que tu camino sea largo,
rico en experiencias, en conocimiento.
A Lestrigones y a Cíclopes,
al airado Poseidón nunca temas,
no hallarás tales seres en tu ruta
si alto es tu pensamiento y limpia
la emoción de tu espíritu y tu cuerpo.
A Lestrigones ni a Cíclopes,
ni a fiero Poseidón hallarás nunca,
si no los llevas dentro de tu alma,
si no es tu alma quien ante ti los pone.

Pide que tu camino sea largo.
Que numerosas sean las mañanas de verano
en que con placer, felizmente
arribes a bahías nunca vistas;
detente en los emporios de Fenicia
y adquiere hermosas mercancías,
madreperla y coral, y ámbar y ébano,
perfumes deliciosos y diversos,
cuanto puedas invierte en voluptuosos y delicados perfumes;
visita muchas ciudades de Egipto
y con avidez aprende de sus sabios.

Ten siempre a Ítaca en la memoria.
Llegar allí es tu meta.
Más no apresures el viaje.
Mejor que se extienda largos años;
y en tu vejez arribes a la isla
con cuanto hayas ganado en el camino,
sin esperar que Ítaca te enriquezca.

Ítaca te regaló un hermoso viaje.
Sin ella el camino no hubieras emprendido.
Más ninguna otra cosa puede darte.

Aunque pobre la encuentres, no te engañará Itaca.
Rico en saber y en vida, como has vuelto,
comprendes ya qué significan las Itacas

KONSTANTIN KAVAFIS               Egipto, Alejandría (1863 - 1933)

No pretendo sintetizar un recorrido tan rico, como el que hemos ido haciendo a través de los aportes de Fernando Alvarez, Gabriel Brarda, Laura Lueiro, Silvia Sisto, Carlos Názara, Alejandro del Carril, Cristina Oyarzabal y Miguel Calvano. Tampoco, homogenizar una orientación. Si releen las clases y ni que decir artículos, que hemos ido enviando producidos por autores diversos advertirán que eso resultaría no sólo imposible, sino también incorrecto, pues barrería con la diversidad y los enigmas, que nos convocan a seguir trabajando. Cosa que espero logremos hacer el año que viene.
Primero, recordemos nuestro puerto de partida, a través de algunas de las razones y propósitos que delineé en la primera clase. Decía en ella.
Por qué intentar este cruce. Decía: Freud nunca renegó de los beneficios que mayores desarrollos en neurobiología podían traer para las terapias de “enfermos nerviosos”. Pero las herramientas que se disponían, tinciones elementales y microscopios ópticos eran insuficientes para ir más allá. En cambio el trabajo con la palabra no necesitaba de ellas y se bastaba con tomar la relación de discurso entre terapeuta y paciente. Fundó entonces una ciencia aplicada que no debía dejar de lado un espíritu artístico, creativo, o a lo menos artesanal. A la vez, encaraba investigaciones básicas sobre las memorias, los olvidos, lo consciente, lo inconsciente, los síntomas psíquicos y sus efectos en el cuerpo. Ocurre así, que el psicoanálisis desde hace más de cien años viene investigando los efectos de la ligazón de lo real de la vida a sus sostenes imaginarios y simbólicos, desde las reacciones del hablante ante ella. Hoy es el momento de volver al puente que fundó el Proyecto... Los neurobiólogos avanzaron hacia la complejidad, desde investigar organismos mínimos. Complejidad en la que los psicoanalistas venimos transitando hace más de un siglo. Gracias a los neurobiólogos, los psicoanalistas podemos avanzar ahora en el entendimiento de como dicha complejidad se encarna en unidades mínimas súper complejas, formadas por átomos, moléculas, desplazamientos eléctricos de bajo voltaje, células, circuitos neurales. Se presagian, posibilidades de manipular incidencias genéticas con objetivos terapéuticos. En los finales del siglo XX y comienzos del XXI, se han generado en cada una de estas disciplinas condiciones de posibilidad, necesarias, y suficientes, para empezar a  hacer posibles estos objetivos.
¿Por qué nos proponemos esta tarea? Porque se han abierto nuevas condiciones de posibilidad para las curas. Ya qué el reconocimiento de la estructura anátomo - fisioquímica de las neuronas, su red de comunicación, la incidencia de genes, sus mutaciones, y todo en relación con los “marcadores somáticos[1]”, nos muestran las bases cerebrales y corporales que soportan la realización subjetiva del “homo eroticus – sapien – faber[2]”. -Este es un bautismo que yo hice hace unos cuantos años, para no quedarnos sólo en homosapiens y en homoerectus, erectus puede ser-. Sus posibilidades de plasticidad, de cargas genéticas, incidencia somato sensoriales y sus funciones percepto  moto  perceptoras (de percepción pasiva, y también activamente receptora de agregados perceptivos recibidos como efecto de acontecimientos de su propio accionar motriz), se articulan en el linde, en el puente, con la estructura borromeica y nominante trans-generacional de lo percibido y tamizado por la Cultura. Articulación realizable sólo en lazos sociales y por efectos de discurso. Por interacción de sus soportes (agente – otro) mediados por letras y significantes, en los que se factura lo simbólico.
Entre, resulta clave en la relación del “sujeto con el significante que lo representa para otro significante[3]. Igual en la relación entre agente y otro en los matemas de discurso. Lo mismo con respecto al “a” atrapado entre los 3 registros. Es un concepto que barre con la idea de psicoanálisis individual y afirma la concepción de psicoanálisis entre analizante y analista, entre las relaciones borromeicas en que se articulan y en las que se re- presentan los otros objetos (a) en los discursos de los que resulta efecto. El aparato psíquico se establece entre el anudamiento borromeico, los 4º nudos –Sinthômes-, que atrapan y dan pista al hablante ser. El cuerpo y el cerebro, quedan bajo su impacto procesándolo  neuro-fisiológicamente, y no sin relación con incidencias genéticas sobre las que a su vez re-actúan. Establecido alguna vez en la filogenia de los hablantes, en este circuito de retroalimentación, no hay lo primero y lo segundo sino una re-alimentación permanente.
¿Para qué intentar este cruce? Para potenciar investigaciones, generar colaboraciones en prácticas de frontera que multipliquen la eficacia de las herramientas de cada uno de los campos de investigación y sus efectos en la práctica. Para acortar tiempos de tratamiento y profundizar sus resultados o cronificarlos, de resultar necesario para los mismos. En la búsqueda siempre, de limitar de amputaciones, las subjetivaciones de los afectados.
Hasta aquí con algunas correcciones, el planisferio de partida.
¿En qué aguas navegamos y qué pudimos ver en ellas? Porque me facilita acceder a algunos nudos, iré criticando en los diferentes sentidos de esta palabra[4], la importante clase que tuvo a bien impartirnos el Dr Gabriel Brarda. –Recuerden ustedes que crítica no es sólo destacar las faltas de algo, sino también es a partir de eso elaborar proposiciones.
Refiriéndose a Michelle una paciente que había nacido con un hemisferio cerebral menos, decía: “Si, su hemiplejia perduró, y ni su miembro superior ni su miembro inferior pudo ser recuperado plenamente, alguna pequeña movilidad logró pero tuvo la postura clásica del hemipléjico. Pero tiene un desarrollo perfecto y normal del lenguaje, dice Brarda. Emocionalidad absolutamente conservada. Memoria como un Savant, tenía la aptitud de memorizar detalles increíbles, uno le podía hacer preguntas como quizás muchos han visto en otras personas: El día 4 de julio de 1888 ¿Qué día fue? Y ella en un instante decía: miércoles. Tenía una forma de calcular aritméticamente el calendario y podía hacer operaciones matemáticas como cualquiera de nosotros. Ahora ¿En qué no estaba bien? Si a Michelle le decíamos un aforismo, por ejemplo: “más vale pájaro en mano que 100 volando”,  Michelle decía cualquier cosa. No entiende qué es lo que queremos expresar con una expresión metafórica aunque tiene el leguaje absolutamente conservado. Si le pedimos por ejemplo que identifique un objeto en el campo visual derecho al carecer de hemisferio izquierdo no puede reconocer ningún objeto y si le perturbamos con algún chiste de doble sentido o ciertamente irritante ella percibe emocionalmente que le estamos tomando el pelo o cargando en algo y reacciona un poco agresivamente. Pero, salvando estas diferencias, Michelle es una persona normal. ¿Cómo explican esto? Le falta todo un hemisferio y particularmente el izquierdo donde reside el procesamiento del lenguaje, las áreas de Wernicke y de Broca… ¿cómo es posible que Michelle desarrollase esta aptitud  y todas las que corresponden a lo que llamaríamos “humanidad”?. Primera observación que le hago al Dr. Brarda: supone que una utilización del lenguaje que amputa la metáfora es: “perfecto y normal”. Que Michelle en dichas condiciones desarrollaba, todas las aptitudes que corresponden a lo que llamamos humanidad. A mi modo de conjeturar, éste, es un error clave. Porque la aptitud que perdió la chica, es la que diferencia a los humanos del resto de las especies animales, la capacidad de interpretar y por lo tanto producir metáforas. En consecuencia la de inventar y responder de alguna manera, a veces bien a veces mal, a lo real.  
Sigue Brarda: “El viejo dogma localizacionista que decía que para una función tendríamos que identificar un área específica fue siempre debatido y hoy día esta corroborado como falso.
Si bien el sistema nervioso aloja funcionalmente aptitudes en áreas predominantemente facilitadas, la potencialidad de corteza hace que cualquier área sea pasible de cubrir cualquier función. ¿Significa que la corteza occipital es aquella genéticamente diseñada para cubrir esa función? La respuesta es no. Genéticamente nada esta definido para cumplir una determinada función. Esta noción es muy importante porque genéticamente heredamos disposiciones para poder cubrir funciones según las necesidades que tengamos en el medio ambiente y si en el medio ambiente necesitamos ver, es cierto que un área va a estar mas facilitada para procesar lo visual, que va a ser el área occipital, pero si no contamos con el área visual para ver y sí contamos con otras áreas y necesitamos ver, esas otras áreas van a suplir esa función. Y aunque no tengamos lóbulo occipital, el lóbulo parietal o el temporal, bajo estimulo de un medio adecuado desarrollarán esa aptitud. Entonces, genéticamente nacemos con un amplio espectro plástico para cubrir las funciones que necesitamos aprender en el curso del desarrollo. Como habitualmente nuestro medio exige inputs visuales tenemos que aprehender representaciones perceptuales y por eso todos tendemos a desarrollar una corteza visual. Pero si de pronto los chicos naciesen en un contexto artificial y lo imaginásemos completamente carente de entradas sensoriales visuales no se desarrollarían esas aptitudes y esos chicos usarían el lóbulo occipital para una función completamente diferente. Parcialmente, a veces más, a veces menos, algo de esa ausencia ocurre con la función madre en chicos que desarrollarán luego alguna clase de autismo. Sigue Brarda: “Qué importante entonces es la adquisición de aptitudes y cómo genéticamente venimos predispuestos para poder adquirir esas aptitudes en el curso del desarrollo.
La plasticidad alude a esta noción. La plasticidad es la capacidad de maleabilidad o de cambio que tienen las neuronas para adaptarse a las exigencias de un contexto determinado y genéticamente esta definida como tal.” O sea, se articulan lo disponible en la arquitectura neural y en la herencia genética de capacidades funcionales de la materia del cerebro, con exigencias y, agrego, ofertas del contexto simbólico imaginario. Centralmente: las funciones madre, y del nombre del padre. Carlos Názara me proponía agregar, y lo agrego: hacen que lo pulsional se vaya intrincando de tal manera que determinadas áreas corporales recibirán la afectación de tal intrincación entre pulsiones de formas homólogas (Carlos Názara). Sigue Brarda: “Entonces, ahora viene una pregunta. Si tomamos desde el momento cero de la gestación hasta el último de los días del individuo en todo el curso de su vida, ¿En qué momento ustedes creen que hay mayor plasticidad, o sea posibilidad de cambio, de conectividad o de reorganización de esa conectividad?”
“...la sabiduría tiene que ver más con la consolidación, con la capacidad de síntesis, con la capacidad de abstraer sintéticamente, de relacionar muchas cosas;  que con la capacidad de cambiar, de sustituir, de generar alternativas. Brarda vuelve a centrar en lo sabido y la capacidad de síntesis, y a minimizar la cualidad fundamental de los hablantes seres, la capacidad de invención, la metáfora, la capacidad de agregar al significante un nuevo plus de sentido.
Sigue Brarda: “El hipocampo y el bulbo olfatorio son las dos únicas áreas que tienen neo-neurogénesis continua, ¿Por qué? Porque los receptores olfativos son terminales nerviosas y tienen que estar siempre renovándose para que no se saturen de información y en función de los estímulos odoríferos que contienen nuevas síntesis de neuronas, y la segunda es el hipocampo porque es la estructura encargada de la memoria a corto plazo y si no se regenerasen las neuronas allí, tenderíamos a fijarnos en memorias muy estables y no tendríamos la posibilidad de borrarlas y tener la aptitud nuevamente de incorporar nuevos registros nemónicos. Como lo recordaron Carlos y Laura en sus clases, Freud ya conjeturó en el Proyecto…, estas funcionalidades “Así que esas dos áreas mantienen la capacidad de seguir sintetizando neuronas, y se pueden ver con microfotografías electrónicas.” Acá, cabe que los psicoanalistas podamos hacer una pregunta  interesante devenida del registro de nuestra práctica. Queda claro que a la función olfativa le sirve la neurogénesis continua en bulbo olfatorio e hipocampo. Habría que investigar la memoria de largo plazo, en función de la experiencia de que algunos caracteres anales, tienen una memoria prodigiosa para reconocer antiguos olores. También que el hecho de que el asco a determinados olores, es una adquisición en la historia de cada uno, lo que suele manifestarse en diferencias entre las personas sobre que le da asco a cada una. El asco es una manifestación refleja descriptivamente  inconsciente, pero que en nuestra experiencia, muchas veces es efecto de antiguos fantasmas estructurados inconscientemente.  “Uno ve la capa del Giro Dentado que es una parte del hipocampo, cómo sobre la base ependimaria aparecen desde stem cells, neuronitas que empiezan a crecer y se van desplegando en las distintas áreas del hipocampo.
Después, todo el tiempo se están muriendo neuronas, eso también lo sabemos ya hace mucho tiempo. No recuerdo exactamente la taza de mortalidad neuronal, pero son de unas cuantas miles por día. Sí, depende también de la edad.
El sistema nervioso es básicamente un tejido de conectividad, de conexión neuronal. Este concepto de arborización y de búsqueda de contacto se llama sinaptogénesis. /…/
¿A qué aludimos con sinaptogénesis? ¿Tienen que ver con arborización dendrítica  o tiene que ver con multiplicidad de espículas dendríticas? Y la respuesta es la segunda. Si respondemos, la sinapsis tiene que ver con espículas, la sinaptogénesis, y ahí viene lo importante del nuevo concepto de plasticidad, se da a lo largo de toda la vida, toda la vida hay génesis, evolución e involución de espinas dendríticas.” Este es el descubrimiento clave que sustrae la discusión de, capacidad o incapacidad de reproducción de las neuronas. La dotación millonaria inicial, hace innecesario una producción mayor. En cambio, la génesis, involución y hasta destrucción de espinas, ¿será el apoyo en la materialidad del cerebro para desplegar las capacidades inventivas de la materialidad del significante? Mientras las letras y los significantes son el alma que la Cultura nos da, la neuro sinaptogénesis es la materia sobre las que trabaja el alma para sostener al hablante en su ser de “a” y en sus movimientos de invención, de metáfora que lo subjetivan.  Para facilitar la imaginación, con los pro y los contra que eso supone, hago una analogía con una marcha a machete entre la selva. Se está sobre un terreno muy fértil, poblado de árboles añosos y una maraña de lianas y vegetación desbordante y de grandes hojas con enorme capacidad y velocidad para regenerarse. Es difícil orientarse, pues la vegetación impide ver el cielo. No se tienen instrumentos mínimos, brújula, mapas. Sólo un machete para ir abriéndose paso y algún conocimiento elemental sobre el clima del lugar en que se está. Estamos en un sur este tropical, sabemos de unas pocas marcas. La cara húmeda, con musgos y líquenes de los árboles, mira al sur, de ahí vienen lluvias y vientos húmedos. A medida que caminamos, habrá que dejar marcas que no se las devoren la tierra o la propia vegetación con su velocidad de reproducción y regeneración. Los pasos que abre el machete, son marcas que nos recordarán por donde vinimos. En cada duda en el camino, conjeturaremos sobre si volver o no sobre nuestros pasos. Pero si estamos a muchas horas de marcha, sabemos sobre el peligro de lluvias, barro, vegetación, que vayan borrando nuestras huellas. Iremos entonces, buscando formas de “plantar” referencias a distancias convenientes. En un lugar nos servirán para eso, piedras de distintos y extraños colores y una rama gruesa, ahuecada de un árbol que nos otorgó una base alta para dejar un montículo de dichas piedras con dicha rama clavada en su centro para que prolongue la referencia hacia lo alto. Más allá, un arroyo en el camino nos servirá de referencia natural. En otro lugar, inquietos porque no encontramos con que dejar referencias, advertimos un arbusto fácil de tronchar con el machete. No se restituirá tan rápido como para quedar disimulado, nos dará tiempo. Y así iremos siguiendo nuestro camino a la búsqueda de un lugar útil, para el descanso y el reaprovisionamiento necesario para seguir nuestra marcha hacia Itaka. Hago una analogía entre el terreno y su explosiva fertilidad, con la sinaptogénesis facilitadas por la producción y poda (pruning) de las espículas dendríticas. Es el apoyo devorador, sobre los que nuestros pies se van asentando. También es la cantera de elementos a utilizar para marcar el camino recorrido y para ir pensando como seguir. Pero todo eso, es utilizado no sólo gracias a los proporcionalmente pocos elementos disponibles, sino a que esos elementos serán destruibles, re agrupables, re utilizables y transformables en sus funciones gracias a nuestras conjeturas, experimentos y nuevos saberes producidos. Capacidad de invención. Por ejemplo, unas piedras sueltas sin orden en el camino, el hueco amplio de una rama ancha, una rama cortada y pelada por nuestro machete resultaron inventos interesantes para obtener nuevas referencias. Se fueron transformando en metáforas importantes de puntos del camino a los que podremos nominar: El lugar de las piedras de colores, El arroyito, El arbusto truncado. Esos nombres dirán mucho más que piedras de colores, arroyo, arbusto cortado. El no uso de la memoria, puede traernos prouning de espículas, el invento: sinaptogénesis. El resultado final, de la asociación entre nuestra batería significante y el terreno sobre el que se depositó y laboró, habrá sido la invención, la metáfora generadora de referencias, no puramente naturales. Lo cual habrá resultado de una deuda de ese objeto “a” maltratado por la estructura en la que tuvo que desenvolverse, con la dotación de significantes y de letras,  capaces de agotado el saber, de producir nuevos significantes o nuevos usos para los perimidos o insuficientes, para desplegar experimentos, pruebas, invenciones. Todo, apoyándose en las capacidades de pruning y sinaptogénesis (de poda y generación de espículas de las dendritas neuronales). El concepto de Lacan sobre la letra –es muy interesante, estuve releyendo la clase de Del Carril, es muy interesante el trabajo que hace Del Carril ahí alrededor del concepto de letra, se los recomiendo-, el concepto de Lacan sobre la como, ese soporte material que el discurso toma del lenguaje y que hace litoral entre lo real y lo simbólico[5] y que debemos entenderlo articulado a: “Que sea instrumento propio para la estructura del discurso, no la vuelve impropia para designar la palabra tomada por otra, incluso por otra en la frase, para simbolizar pues ciertos efectos de significante, pero no impone que sea primaria en estos efectos.” Entendido así, desborda a las letras de los abecedarios, para poder usar también palabras. Aquí, aún no como significantes. O frases, ideogramas, pictogramas, gesticulaciones, actos, prosodias, etc.
También debemos entender que: “No se impone un examen de esta primariedad, que incluso no debe suponerse, sino de aquello que del lenguaje llama el litoral a lo literal.” Lacan otra vez ahí. Lo único primario es lo litoral, los bordes de los agujeros en el saber que invocan al goce en la invención, lo que suele no dejar de comportar un cierto grado de angustia, por mordedura de lo real sobre lo simbólico. El que está por inventar, se angustia en el momento de inventar. Escuchen el relato de cualquier poeta, cualquier literato, cualquier inventor ya en otras artes, en otras prácticas digamos, y todos les van a contar la angustia que los toma cuando se acerca el momento de la invención. Por ejemplo la angustia ante la página en blanco, es típico.
Nos explicó Brarda un tercer concepto de plasticidad: Nacemos con unos cien mil millones de neuronas. “Esas neuronas sabemos que a lo largo de la vida, progresivamente se irán perdiendo. Pero una tasa pequeña, dependiendo de las noxas o de las afrentas de la vida. Pero hay un proceso que se da sobre el final de la gestación y hasta los 2 años, /…/ donde se produce una marcada muerte celular. Se mueren muchas mas neuronas que las que sería  dable esperar, si vemos la taza de pérdida progresiva que luego de los dos años se da a lo largo de la vida. Esto se llama apoptosis. La apoptosis es la muerte cerebral genéticamente programada. Significa que entre este periodo, fines de la gestación y los dos años, va a haber mucha más muerte que la normal o la esperada. /…/  ¿Por qué genéticamente se programan muerte celular, muerte neuronal? Y si siguen el razonamiento pueden concluir que en el cerebro adulto finalmente vamos a tener muchas menos neuronas que las que tenemos cuando nacemos o desarrollamos hasta los dos años /…/ Muchas menos. El cerebro de un infante tiene más neuronas que las que el adulto posee. ¿Por qué es necesario perder neuronas? Cuando tenemos las necesarias conexiones, (dos años, dos años y medio más o menos, tenemos todas las aptitudes, lenguaje incluido). Las que nos son redundantes ¿para qué las vamos a querer? Sobran. Es más, nos molestan. Porque si perdurasen generarían interferencia. No es buena conectividad, es redundancia innecesaria. Entonces, la muerte celular programada alude a que muchas tienen que limpiarse, barrerse. Como se les escama la piel.
Bueno en primer lugar, todo el trabajo de Brarda responde mucho a una epistemología teleológica. ¿Y saben lo que es una epistemología teleológica? Bueno, donde se supone que si algo ocurrió es porque tiene un fin. Digamos el azar que ha estado siempre tras cualquier selección natural, es cierto que después sobreviven los más fuertes, pero un azar llegó a que se confrontaran con la vida o la muerte una serie de elementos…
Si como se dijo, me pregunto, en el autismo hay una superpoblación de neuronas, con lo que se puede sospechar que la apoptosis no se efectivizó plenamente: ¿La “poda” estará sirviendo para reducir las conexiones “internas” y facilitar la recepción del medio ambiente? (Es un agregado que me propone Carlos  Názara y que me parece bien) La piel se escama, porque ustedes vieron que ahí aparece lo de la teleología por ejemplo en Názara… la piel se escama porque la neo–génesis   de epitelio expulsa al epitelio envejecido. Pero no ocurre así por ejemplo en trabajadores manuales, en los que por el contrario, se desarrollan zonas de híper queratosis en los lugares de roce frecuente, lo que los protege de escaldaduras por fricción. Híper queratosis es un engrosamiento de la piel. Vuelvo al Dr. Guillermo Brarda: ¿Para qué necesitamos seguir acumulando capas de células epidérmicas? Tienen que barrerse y quedar aquellas neuronas que sí sirven a una conectividad funcional. Ahora vamos a la clínica, bueno ahí por ejemplo hay algo que Brarda no piensa, y que esta evidente en lo mismo que el dice, de los cientos de miles de millones de células neuronales que hay en el cerebro, hay una cantidad que están latentes, que no son utilizadas, el mismo lo dijo, o sea que en verdad eso de matar células para poder estar más cómodas no pareciera tener mucha lógica. Dice: ahora vamos a la clínica si entonces decimos que hay apoptosis hasta los dos años, dos años y medio, esto ¿lo pueden correlacionar con la clínica? ¿Qué evento clínico acontece que puede explicarse por la apoptosis? Algo que Freud descubrió hace muchos años atrás y que lo explicó de otra manera: La amnesia infantil. La amnesia infantil quizás tengamos que empezar a entenderla no bajo el concepto de represión sino  bajo el concepto de pérdida de conexiones que son redundantes y por eso no nos acordamos o vagamente acordamos o hacemos construcciones imaginarias de lo que fueron experiencias tempranas. Es cierto que la amnesia  -creo - Freud la sitúa digamos a partir de la represión del complejo de Edipo en  los 5 años. Pero uno puede ver por experiencia personal o por otros individuos que algunos recuerdos existen entre los 3 y 4 años pero antes de los 2 años y medio es casi imposible que alguien  se acuerde de algo. Y esto es explicable bajo esta concepción.” En este punto, me parece importante distinguir, la amnesia por no disposición de un mínimo manejo de la lengua y el lenguaje en el tiempo del acontecimiento, a la que coloco bajo el orden de la represión primaria. Y atribuyo –dicha imposibilidad de relato-, a la ausencia radical de gramática, sintaxis, y a una enorme pobreza semántica en los tiempos en que ocurrieron hechos, escenas y consecuencias.
En su momento, supe por los diarios, del hijo de una pareja secuestrada y asesinada por la dictadura, adoptado luego por una familia extraña y registrado civilmente con el apellido de la misma. No guardaba de dichos acontecimientos, recuerdos con estructura de relatos. Sin embargo, era acosado angustiosamente por sueños traumáticos en los que escuchaba explosiones fuertes, y otras breves y regulares.  Recuperado por su abuela, oyó el relato del cerco militar a su casa de origen, el cañoneo de que fue objeto y el tableteo de metralletas y fusiles en el combate en que sus padres fueron muertos. Había conservado la imagen auditiva de las explosiones, aunada a la cenestésica de la angustia, probablemente trasmitida por el cuerpo y rostro de la madre y el padre. Pero no podía armar un relato con esas representaciones de cosa -sache vorstellung- en la nomenclatura de la Metapsicología de Freud.
Cuento otro caso que supervisé cuando trabajaba como responsable del departamento de atención a los afectados por la represión del Servicio de Paz y Justicia. Una criatura que en esa época, tenía 7 u 8 años, practicaba un extraño ritual con respecto al cual no podía elaborar relatos, ni dar razones. Se levantaba en la noche, salía al patio, hacía unos extraños ruidos y movimientos; para alojarse luego introvertida y asustada en las faldas de la mamá. Siendo bebé, era la hija menor, había entrado una “patota” de la marina que secuestró a su padre para no devolverlo nunca más. Escena de gritos, llantos, e intenso dramatismo, habían ocurrido. La madre y todos los hijos, incluida la beba, fueran tirados sobre la cama matrimonial y envueltos en una gran manta en absoluta confusión. En la terapia familiar, cuando la señora repetía dicho relato, la niña se paraba y se alojaba en las faldas de ella. Con buen criterio y sin forzamientos, la coterapeuta en una de esas ocasiones la tomó suavemente y la devolvió a su lugar en la reunión, diciéndole que era ese. A partir de entonces, cedió el extraño ritual. Un significante que la representara en articulación a un lugar por fuera de la mamá, emitido en el tiempo de concluir oportuno, relanzó la cadena significante de dicha criatura. Me parece bastante probable, suponer que ese acto produjo poda de espículas y neo génesis de otras, con los consiguientes reordenamientos de las redes trans- dendríticas. El significante justo, vía el gesto y la palabra  que lo vehiculizaron, recolocó a la niña, despegándola de la simbiosis que el acto trágico había grabado en ella y del cual sólo encontraba un exutorio reducido en el extraño ritual.
Son recuerdos y olvidos diferentes de la represión infantil pos edípica. Hipotetizo: los sueños traumáticos con la memoria de las imágenes auditivas y cenestésicas anidadas de alguna forma en una red de espículas, sostenían con su recurrencia, una memoria de largo plazo asentada en dicha red a la vez que realimentaban a ese tejido inter espículas. En este tipo de ocasiones me resulta muy importante rescatar la diferenciación que hizo Freud en Metapsicología, entre, -representación cosa, representación palabra y representación objeto. (Equivalente al primer algoritmo Seassuriano de significante sobre significado) Esta, o sea la representación objeto equivalente a significación en lingüística, Freud la propone como la articulación entre las otras dos, -representación palabra y representación cosa-. Estos dos casos conservaban del hecho traumático, sólo imágenes auditivas uno, y en el cuerpo la otra. O sea sólo conservaban representaciones cosa. Sólo el lenguaje y la lengua, podían devolverles un relato que les diera un lugar en la estructura de su vida. Relato que verdadera o míticamente, lograra encadenar como recuerdos por venir, las letras provenientes de quienes les relataron en su lengua dichos acontecimientos de los que sólo conservaban imágenes, representaciones cosa.
Continúo con Brarda: Vamos por otro concepto de neuroplasticidad  del desarrollo, el 4º.
Si la  apoptosis es la muerte celular, podríamos buscar un concepto intermedio que no sea necesariamente la muerte de toda la neurona genéticamente programada desde el núcleo celular, sino un concepto de poda dendrítica o pruning. La poda dendrítica ya no es a nivel microscópico sino justamente una poda más significativa del conjunto de arborizaciones dendríticas. La poda se produce a partir del nacimiento y en distintos momentos del desarrollo, el pruning es el mismo fenómeno que la apoptosis pero a nivel de las dendritas. Hay un pruning temprano en los primeros años al igual que la apoptosis, pero hay otro período muy interesante donde el pruning vuelve a ocurrir de una manera significativa: la pubertad y la adolescencia. En ese período las hormonas reconfiguran todo el sistema nervioso, hacen que el mismo comience a funcionar de una manera completamente diferente porque la reproductividad así lo exige.
Esto es muy importante porque también desde la clínica creemos que las experiencias tempranas terminan moldeando significativamente los patrones, imagos, esquemas dicen lo congnitivistas, que definen la modalidad interpersonal o interactiva que el individuo tiene a lo largo de la vida. Y ciertamente es así, los dos primeros años de vida son sumamente vitales para ello, pero esto no tiene que excluir la reorganización que nuevamente vuelve a ocurrir en la adolescencia en donde podemos tener representaciones muy consolidadas que vuelven otra vez a reconfigurarse a partir de experiencias propias de la sexualidad y de la sociabilidad que hacen que un sistema nervioso tenga aptitud plástica significativa para esa edad.” Me parece importante subrayar, no sólo la coincidencia con el descubrimiento freudiano, sino también el valor que toman las transformaciones anátomo, histo –fisiológicas de esta edad como sustento exigente desde la biología y lo real, lo radicalmente no sabido por esos púberes y adolescentes sobre ese cuerpo que los sorprende, y que los exigen en el terreno simbólico imaginario. “Y eso lo vemos por ejemplo con otra  actuación clínica que se da particularmente en la adolescencia: La esquizofrenia y la hebefrenia. La esquizofrenia es una enfermedad en la que se precipita  ese pruning adolescente, particularmente la hebefrenia que es la más grave de todas y la más temprana. En estos cuadros podemos visualizar cuando el sistema nervioso no puede reorganizarse, y el flujo hormonal y la reorganización del flujo sanguíneo del sistema nervioso hacen que la conectividad en el caso de la esquizofrenia decaiga enormemente. El pruning justamente en estos trastornos es altísimo, y esto es una de las correlaciones que observamos para entender por qué es tan florido el cuadro de la esquizofrenia. O sea, hay una gran destrucción de espículas sin nuevas sinaptogénesis. Lo observado, tanto por psicoanalistas –Fidias Cesio, José Bleger, Madelaine Baranger, como por terapeutas sistémicos en particular Gregory Bateson, es la existencia en los vínculos con quienes llevaron adelante la función madre, de enunciados enunciaciones con modalidades de doble vínculo, ambiguas. ¿El marcado pruning en esa dolencia, será condicionado por la imposibilidad en esos jóvenes de haber encontrado determinado un lugar simbólico en los dichos de la madre, desde el cual  responder a las exigencia de los nuevos reales que el conjunto del cuerpo les plantea? Lo dejo cómo interrogante.
/…/“Por el contrario vamos a proponer  un caso clínico contrario a la esquizofrenia, un caso donde no haya pruning, donde en la vida del individuo haya una alta neurogénesis, una alta sinaptogénesis, la apoptosis siempre existe pero con una muy escasa actividad de podado: el autismo. Cuando uno analiza los cerebros de autistas uno ve sobreabundancia de neuronas y sobreabundancias de conectividad dendrítica. Es la antítesis de la esquizofrenia. En la esquizofrenia tenemos excesiva poda adolescente y en el autismo, como trastorno de desarrollo, tenemos una escasez de poda.
En ese punto respondió ante una pregunta mía sobre autismo “curado” por esquizofrenia, porque es una observación  de muchos psicoanalistas cómo los autismos cuando se curan solos se curan por vía de un brote esquizofrénico. Se curan. Me responde: “A veces los cuadros son mixtos y efectivamente ocurre que un autismo temprano a veces hace cambios de mixtura en la adolescencia y devenir una esquizofrenia. En ese caso diríamos que no hubo pruning temprano y de pronto eso que fue una evolución fenoménica o fenotípica como un autismo llega  en la adolescencia y hace una excesiva poda y ahí tenemos un trastorno mixto como trastorno de desarrollo y esquizofrenia. Explicación posible, como mecanismo genético fisiológico. Pero instala la pregunta por causas y razones del mismo. Más, teniendo en cuenta, una particularidad  que muestran los Savants también conocidos por síndrome de Aspergher. Dicha particularidad en esos particulares autismos, reside en que a la vez que desarrollan todos los rasgos del autismo: introversión casi absoluta, elusión de las relaciones sociales, fuertes tendencias al aislamiento, negativismo, oposicionismo, torpeza en el manejo del esquema corporal; pueden tener híper desarrolladas a niveles inesperados, alguna función muy especializada. Por ejemplo memoria concentrada en X cuestión. Supongamos, en números. Lo que recordarán ocurría también con Michelle, el caso que tenía un hemisferio cerebral menos y con el que abrió la clase Brarda. A la  vez todas las investigaciones coinciden en que los autismos desarrollan su pensamiento en imágenes. Cosa que Laura Lueiro en sus clases recalcó suficientemente. Pensamiento en imágenes que no excluye, en los que acceden a algunos niveles de habla, de graves defectos en el capital semántico, sintáctico  y gramatical en general.  De lo que hemos ido leyendo y de la experiencia práctica, sabemos que tienen un pensamiento concreto, desértico de metáforas. Algunos de los interrogados relatan que cuando escuchan lo que se les dice, tienen que traducir las palabras a imágenes. No tienen inventiva. Se me podría argumentar que la señora Temple Grandín, Aspergher minuciosamente investigada por Oliver Sack, movida por el dolor que le causaba suponer el sufrimiento que podía aquejar a las vacas en su marcha por los corrales que las guiaban al matadero, “inventó” nuevas formas que les evitaran a dichos animales advertir la agresión mortífera a que se allegaba su precedente, tratando de evitarles el miedo que sufrirían. Pero dicho invento no sale de las imágenes visuales, ya que consisten en el diseño de nuevas formas de corrales. Las que conjugaban sinthomáticamente, (lo escribo con “h” intermedia 4º nudo) su sadismo – las vacas serán “asesinadas” según esos nuevos dispositivos- con su formación reactiva, ahorrarles el sufrimiento previo. Se me instala la pregunta, sobre si la apoptosis, el pruning y la sinaptogénesis en ciertos casos, se torna selectiva. De ser así, una nueva pregunta, ¿Qué y por qué se orienta dicha selección?  Se me hace claro aquí uno de los lugares en que Freud tal como su padre mítico Moisés, queda mirando y sin llegar a entrar, en las afueras de Jerusalén... Su metapsicología de las representaciones recordada antes, lo deja sin ir más allá de: significante, imagen del objeto, signo. -Lo que ponía arriba, representación cosa, más representación palabra, más representación objeto, igual signo.- Esta es en su metapsicología, la articulación entre imagen y significante. Su esquema sería: RC+RP = RO, que nosotros podemos hacer equivaler al signo de la lingüística Saussuriana
Signo = S
              s 
Teóricamente,  no  llega a poder definir la metáfora. Prácticamente, se acerca con su descripción de la condensación en La Interpretación de los sueños. Para Lacan, la fórmula de la metáfora es: función metafórica es  congruente con significante atravesando la barra y produciendo significación.              
f (S’) = S (+) s
    S              
Lacan procura indicar con esta fórmula que “…que es en la sustitución del significante S (ven que quedó bajo la barra) por el S’ que se produce un efecto de significación que es de poesía o de creación, dicho de otra manera de advenimiento de la significación en cuestión. El signo + colocado entre paréntesis (+) manifiesta aquí el franqueamiento de la barra – y el valor constituyente de ese franqueamiento para la significación s.” Significación que se produce, por su relación al contexto significante que soporta a toda la operación, o sea si un significante sustituye al otro y no hay un contexto significante no se produce ninguna nueva significación, es el contexto significante de que en sus metonimias le da el valor de nueva significación. Significación que se produce, por su relación de sentido que el significante trae de sus sentidos previos. Si esta operación se produce en el tiempo lógico oportuno, considero probable que incida en facilitar, impulsar, alguna nueva sinaptogénesis. -El nuevo significante el plus lo produce por significaciones que trae de sus sentidos previos, es el agregado. Y la relación entre el contexto y el agregado produce el efecto metafórico.- Es lo que los afectados por el fracaso de la apoptosis o por lesiones graves del estilo Michelle, no pueden hacer. No pueden prescindir de las imágenes. La señora Temple traduce las palabras a imágenes lo que la deja en Representación Cosa + Representación Palabra = Representación Objeto, lo que la mantiene anclada a sus signos, imposibilitada de metáfora, de invención, atada a la Representación objeto.
Sigue Brarda: Entonces, aquí tenemos el concepto de plasticidad desde el punto de vista del desarrollo y pueden ver que si se acercan con detenimiento la neuroplasticidad es un potencial adaptativo facilitador del cambio y de la reorganización pero también conlleva algunas características negativas según cómo las contemplemos. Veamos ejemplos en la adultez, porque decimos que en la adultez si va a haber neuroplasticidad, se va a dar básicamente  a nivel de las espinas dendríticas del árbol dendrítico de la neurona. Una espícula puede emerger o retrotraerse, cuando hay actividad sináptica y cuando una espícula emerge, se crea, se genera, decimos que hay sinaptogénesis de brotes dendríticos, con esta acepción decimos que hay una avidez de conectividad que hace que una espícula nazca, y uno puede decir ¿Y qué es lo que hace nacer a ésta si antes no estaba?  Hay una demanda del medio que exige una conectividad, hay algo que está pasando que demanda que haya una conectividad que antes no existía.  De manera que si ésta no estaba y ahora está es porque del otro lado hay un botón de una terminal axónica de otra neurona o de otra dendrita, (no crean que  siempre las conexiones son axón-dendríticas, pueden ser dendo-dendríticas. Pero hay una demanda desde otra neurona. En el axón de la primera, empieza efectivamente a haber una descarga de neurotransmisor en esa localización producto de una demanda que desde otro contexto llámese circuito, o medio ambiente hace aquí que el  axón tenga alta despolarización de membrana con alta liberación de neurotransmisor. Esa es una señalización química. Al haber mayor neurotransmisor se le está indicando a la dendrita que allí tiene que haber una vesícula pos sináptica para que se genere una conectividad sináptica a fin de que en un futuro por esta vía, circule la información.” Esta información que exige la transmisión sináptica es la demanda de los otros, vía los planteos significantes en los que un significante de alguien demanda saber que provenga a través de significantes de otro(s). Esto tiene un nombre, esto se llama LTP (Long-Term Potentation) Potenciación de largo plazo. La potenciación de largo plazo es una evidencia de no hace mucho tiempo. Dos suecos  observaron que cuando una terminal tiene una alta descarga, una alta taza de actividad del orden de entre cien a mil descargas en un lapso muy breve, el neurotransmisor liberado allí induce en la membrana y en el metabolismo post sinápticos actividades que reguladas desde el núcleo de la neurona posibilitan síntesis de proteína a fin de generar una nueva espícula. La potenciación a largo plazo es una variedad de sensibilización para que una espícula que no existía esté presente de “novo”, de la nada. ¿Saben cuánto tarda en generarse un espiculita? Veinte segundos. La LTP  es la base de la memoria y del aprendizaje. Porque aquí donde hay una conexión, una nueva sinapsis que antes no estaba, puede ser el  ejemplo de un engrama de memoria que estoy fijando estructuralmente con proteínas.” Se hace muy evidente en este párrafo de Brarda, como la sinaptogénesis es una respuesta de las dendritas, las espículas y la reorganización de las redes de sinapsis, a las demandas del medio. Medio sintetizado en cuerpo materno, palabra del padre, sexualidades en diferentes edades, acontecimientos de lo real de la vida.
La memoria y particularmente la memoria a largo plazo ocupa espacios, son proteínas pequeñísimas pero allí están, el espacio es del orden de los micrones, de los milimicrones, es muy pequeño el tamaño de una espícula. Pero hoy día podemos verlas con sistemas muy sofisticados de  imagenología./…/ Las memorias existen en la medida en que las utilizamos, si no las utilizamos las perdemos ¿Cuánto tarda una espícula en perderse, si 20 segundos tarda en aparecer?  Veinte minutos, o sea tardan un poco más. Hay una latencia, hay una inercia de las memorias, tendemos a conservarlas, pero si no las ejercitamos las perdemos. Acabamos de aprender la neuroplasticidad que se da en el adulto con el concepto de potenciación de largo plazo que es la base de la memoria y el aprendizaje, y es lo que Kandel ha estudiado. /…/
“Así que cuando hablamos de neuroplasticidad decimos que es la aptitud todavía conservada de la capacidad de conectividad sinaptogénica del cerebro adulto que no se pierde en toda la vida, pero está limitada a áreas restringidas y sobre todo a actividad dependiente. Este es el concepto central que tenemos que tener también: actividad dependiente. Decimos actividad dependiente porque si esa conectividad se actualiza, se conserva.  Si no se actualiza, se pierde, al igual que el músculo.” /…/  O sea: la clave está en los vínculos sociales que exigen a relacionarse discursivamente. Los discursos, sus letras, sus intercambios significantes y de significantes convocan a la sinaptogénesis, a los prouning, a los enredos entre sinapsis sosteniendo sus producciones, reproducciones y muertes. A la vez, sin esas apoyaturas cerebrales, se desmaterializarían  letras y significantes. No habría quienes los leyeran y continuaran el juego. Juego apoyado neuroquímicamente en que: “las sinapsis básicamente pueden dividirse en excitatorias - mediadas por un glutamato o inhibitorias mediadas por Gaba.”
El planteo sobre la función de las espículas, su red, la sinaptogénesis y el pruning, creo que hay que pensarlo en una complejidad mayor que la reducción de: “Las memorias existen en la medida en que las utilizamos, si no las utilizamos las perdemos ¿Cuánto tarda una espícula en perderse, si 20 segundos tarda en aparecer?  Veinte minutos, o sea tardan un poco más. Hay una latencia, hay una inercia de las memorias, tendemos a conservarlas, pero si no las ejercitamos las perdemos. Creo que gracias a Antonio Damasio teorizando la complejidad de las Representaciones disposicionales, su funcionamiento por disparos simultáneos para el ejercicio de la memoria, este no queda reducido a un acontecimiento espícula por espícula. Sino que se extiende al que promueven en la red, los disparos de redes particulares de representaciones disposicionales que abarcan incluso a muchas más que las puestas en movimiento en cada evocación, debido a los arrastres que producen de las que laten en vecindad. ¿Recuerdan el señalamiento de Damasio y también de Kandel de las vecindades? Supongo que de ahí, ocurre la renovación constante de vida de espículas. Propongo una fórmula: Diferencia en la repetición =  Metáfora: f (S’) = S (+) s         Sinaptogénesis  =          
      Apoptosis    Poda   
S (+) s       Sinaptogénesis (+) Apoptosis/ Poda      
                    
O sea: que la Metáfora, losange, o sea mayor-menor, disyunción-conjunción con la Sinaptogénesis , atravesando la barra de la apoptosis y los pruning para producir y memorizar nuevos significantes o antiguos significantes con nuevas funciones que metaforizan e inventan.
O sea que en este final de seminario, no me quedo en lo que nosotros criticamos inclusive en algo del orden del error en Ansermet cuando equipara signo perceptivo con neurona, sino que me parece que la cuestión pasa en relación a las espículas, a la Sinaptogénesis y a los pruning.
He dicho, la palabra es de ustedes… Prefiero que intercambiemos porque sé que les tire un vagón.

X: -Habías hecho una analogía en relación a al Sinaptogénesis y se me fue, yo no te quise preguntar en ese momento una parte de la frase que se me fue. No quería interrumpir en ese momento. Vos dijiste que la Sinaptogénesis se da a lo largo de toda la vida, y tenía que ver esto con que hay evolución e involución de las neuronas. Y después dijiste que la Sinaptogénesis es la materia ¿Qué?...Eso
S. R.: -Ah si…Que la Sinaptogénesis y el pruning son la base material para la materialidad del significante. No se si ustedes recuerdan La Instancia De La Letra, O La Razón Después De Freud, donde Lacan hace una jugada muy audaz. Donde evidentemente estaba discutiendo con el marxismo vulgar para decirlo de alguna manera. También con la psicología concreta. En cuanto a suponer que sólo es materia lo que es material. En cambio Lacan plantea ahí, la materialidad del significante. Eso que en aquel momento fue una jugada audaz de él, digamos con la demostración de la experiencia del análisis se confirma. Pero no se podía demostrar prácticamente. Creo que ahora con los desarrollos en neurobiología es mucho más demostrable. En el sentido que efectivamente la Sinaptogénesis, el pruning, la apoptósis, las redes conectivas interneurales, interespículas, interdentritas dan la materia en la cual se engarza la materia del significante vía glutamatos,  GABA, lo neuroquímico. No habría significante si no hubiera materia cerebral. Y sin significantes, no habría materia cerebral cómo la conocemos ahora. No habría, materia cerebral humana. El desarrollo que tiene con respecto a la de cualquier otro animal es impresionantemente distinto, no habría materia cerebral humana cómo está actualmente, si no existiera la materialidad del significante que está depositada en la cultura. Yo hago una jugada ahí casi tomándole el poco pelo que tiene a Alejandro del Carril, porque él, que se ve que está desesperado por saldar sus cuentas con la religión trajo la discusión del alma y la materia ¿Se acuerdan en la clase de él? Yo a propósito digo, y creo, y voy a explicar por qué. Que el alma es la Cultura. La materia es el cuerpo y el cerebro. A mí este recorrido me permitió terminar de entender cuánta razón tienen las religiones en hablar de cuerpo y alma. Por supuesto no como ellos lo creen míticamente, que es cómo lo pudieron explicar. Pero en definitiva es una observación de los seres humanos. La Biblia, el Coran, los libros budistas, etcétera. Tienen en sí miles de años acumulados de observaciones y observaciones y observaciones, que entonces le producen metáforas a los que escriben, al que pueden, al que está en condiciones en ese momento. Todos estos miles de años que vienen hablando de cuerpo y alma, que yo como marxista en otra época hubiera re pudiado, ahora lo reivindico, me doy cuenta que tenían razón. No en la sustancia que ellos planteaban pero si en la metáfora que proponían. ¿Te conteste?

X: -Si.

Laura Lueiro:-Uno de los aspectos que Lacan toma en relación a la materialidad de la letra es por el lado de que la letra es la mínima unidad fónica. Entonces  que el sonido es material. Las ondas sonoras… ¿Cómo?

X: -El dice algo así cómo que soporta la materialidad.

L. L.: -Claro…Si, si, si. Pero que una de las formas materiales de la letra es el sonido. Cuando él define que la letra es el soporte material que el discurso concreto toma del lenguaje digamos la definición clásica de La Instancia De La Letra Del Inconsciente en algún lugar de la instancia de la letra, dice la letra es la mínima unidad fónica. Cómo definición de la letra. Y en tanto mínima unidad fónica en el sentido de cómo me enseñaron a mi el alfabeto, ahora ya no se enseña así. Que nos decían a b c d f, esa la mínima unidad fónica hay un soporte material que son las ondas sonoras de pronunciación, la mínima unidad de sonido. Distinguible a la otra unidad de sonido que se puede discriminar cómo tal. Digo porque no es sólo la materialidad. Después lo va a relacionar también con el trazo en relación a al escritura, el mínimo trazo distinguible de otro, no se supongo, a mí me cuesta pensarlo y no digo ni que si ni que no, digo me cuesta pensarlo en relación a una espícula. Como que me parece que ahí hay un salto como si se tratara de estofas diferentes. No se, me cuesta. Puede ser que haya relaciones, de hecho son observables clínicos de por qué las interpretaciones tienen eficacia. Eso lo vemos todos los días. Algo pasa. No sé, estaría buenísimo, si a los pacientes le pudiéramos poner ahí, no sé interpretarles con un tomógrafo, no se qué, y ver qué pasa adentro de, claro porque evidentemente pasan cosas, no sé qué pasa. Me cuesta, por ahí vuelvo a la frase de Magistretti “Las palabras tienen efecto sobre la red neuronal. Tienen tanto efecto cómo una droga, tanto efecto cómo un neurotransmisor” Tal vez me resulte más fácil entenderlo en términos metafóricos que en términos materiales que es cómo  vos lo estas planteando. Vos estas diciendo que efectivamente la palabra puede generar el crecimiento de un espícula o hacer que esa espícula se retraiga. Y quizás así sea. Qué se yo. El resultado parece ser ese. Entonces lo que vos decís es lo que dice Magistretti desde la neurobiología. Desde otro campo. Ah y otra cosa que se me había ido y ahora me volvió. En algún momento vos dijiste en el alma y por un lado el alma es la Cultura y por otro lado el cuerpo y el cerebro. Esta cuestión del cuerpo y el cerebro me parece que es algo que nos ponemos a analizar rápidamente y podemos caer en un nuevo dualismo. Me parece que no es cuerpo y cerebro. El cerebro es parte del cuerpo. Es cuerpo tuyo, el cerebro. Si vamos al cuerpo y cerebro vamos a un nuevo dualismo. Elijo alma por un lado y cuerpo y cerebro. Pero caemos en un nuevo dualismo cartesiano. A ese tipo de dualismo si pensamos el cerebro por un lado y el cuerpo por el otro…

S. R.: -…si yo digo cuerpo y cerebro es una conjunción.

L. L.: -No, pero qué ¿El cerebro está por afuera del cuerpo? El cerebro…arriba….a porque está up…

X: - …Bueno digamos ayer estaba  pensando un poco en esto que decías del autismo en donde no se pierden conexiones, no se pierden neuronas, en donde todo puede ser todo, y de hecho no es nada. Y en la esquizofrenia, en donde si se pierden, y bueno de hecho quedan determinados delirios y otros no. También pensaba en esto que hablabas de la selva, donde bueno se iban haciendo, y yo trataba de traducir… todo eso, que para mi sigue siendo complicado. Y se me ocurre… si esto último que vos decís de la metáfora relacionada con la Sinaptogénesis, los pruning y todo esto, si no tiene que ver con esto de hacer caminos significativos, cómo hay en la selva en donde bueno algunos caminos se pierden y otros se hacen nuevos, y van quedando y eso es lo que hace que un sujeto sea sujeto y no un autista. Es como una traducción un poco simplista se me hace pero bueno es lo que un poco, parte de lo que saque de todo esto, y de cómo se puede relacionar desde lo neuronal y también desde lo psicoanalítico se me ocurre. Nada más que eso…

S. R.: -El relato que les arme sobre la selva tiene que ver con eso. ¿Alguno de ustedes ha estado en selvas subtropicales? Son muy impresionantes, a veces con ir al Delta en determinadas épocas también se observa, la velocidad con que la vegetación empieza a cubrir todo. También á velocidad se destruyen muchos sectores. Entonces la metáfora tiene que ver con eso efectivamente. Independientemente de que algunas cosas que yo planteo, las planteo como en general las planteo todas, cómo hipótesis. Y lo veremos ahora en la conversación con Laura sobre la cuestión de la Sinaptogénesis, pruning, etcétera. Pero lo que es evidente, es que a lo nuevo que han apostado los neurobiólogos y que es muy importante, aquello que nos permite pensar la articulación entre la Cultura el cuerpo y cerebro, es a esa explosividad tropical que tiene el complejo neurocerebral y que tiene la cultura. Y con todas las paradojas que tiene la Cultura, porque la Cultura cada vez que produce un invento sin lugar a dudas produce un progreso y sin lugar a dudas produce un desastre. Ese desastre obliga a repensar y a rehacer algo con ese invento. Es el cuento de nunca acabar. Entonces voy a lo de cuerpo, cerebro, Sinaptogénesis, pruning, apoptósis, significante, letra, etcétera. Todo lo que decís de la letra lo plantea Lacan, pero hay algo que yo retome de Lacan y que está planteado y que es muy importante, una letra puede ser una frase entera. Quiero decir, no se reduce a la mínima unidad fónica. Lacan empieza planteando la materialidad de la letra por el lado de la unidad fónica, es la instancia de la letra. Pero luego cuando el va desplegando su conceptualización sobre la letra, la tiene que despegar. No despegar digamos, sino que pasa a ser secundaria la cuestión de la unidad fónica. Porque en verdad lo que pasa a tomar un lugar muy fuerte es la cuestión de litoral. Esa es la clave en relación a la cuestión de la letra. O sea en aquel punto donde lo simbólico no alcanza, ahí se produce el litoral, va a surgir una letra. Que puede ser un discurso entero, puede ser una frase, puede ser una letra. Que re-trabajará a ese real. Lo puede re-trabajar exitosamente. O lo puede re-trabajar fracasadamente. Pero será re-trabajado. Si lo re-trabaja exitosamente, algo de ese real habrá cedido terreno a lo simbólico con una reaparición de nuevos reales. Bueno en ese sentido, yo no me reduzco a la espícula, tomo a la espícula porque es, lo dice Brarda en su trabajo, y es más o menos lo que yo había entendido de Damasio y de Kandel, no tan especificado cómo lo especifico Brarda lo explicó muy bien, el verdadero lugar de la plasticidad cerebral es la espícula. El tema de la neurona a mí me resulta secundario porque efectivamente hay tal sobre capital de neuronas digamos, que hay una enormísima cantidad que está latente, y que es convocada cuando, cuando otras mueren, siempre y cuando haya una política digamos, para que sea convocada. Recuerdo un artículo que hiciste llegar vos Laura, de unos neurólogos que habían hecho recuperar los movimientos del brazo y de la mano a una señora prohibiéndole usar el otro. Atándoselo. Yo cuando tuve polio me hicieron algo parecido. A mí me prohibieron escribir con la izquierda. Yo tuve polio justo a los seis años, o sea recién cuando empezaba la primaria. Sabrá ustedes disculpar mi letra de médico, pero además tiene que ver con la polio efectivamente porque me vi obligado a escribir con la derecha y yo no sé escribir con la izquierda. Pero evidentemente eso facilitó mucho mi recuperación en cuando a lo que más afecta la polio que es al sistema nervioso periférico. En realidad la polio deteriora ahí en el sistema periférico. Pero evidentemente de algún modo reforzó mi centro de Broca, de Wernicque, etcétera, así soy de charlatán, que me las pude arreglar con mi brazo digamos. Entonces por eso me centro en la espícula como el lugar de las modificaciones vía la Sinaptogénesis y el pruning. Pero eso como le llamemos  -célula-, no en el sentido célula, uso metafóricamente célula, como la célula de las modificaciones en toda la red Sinaptoneuronal digamos así. Y ahí entonces toma un lugar muy fuerte la cuestión de las representaciones disposicionales y los disparos, todo el tema de la memoria, etcétera. Yo no me centré acá porque ya lo desarrollaron mucho los colegas en sus clases por lo que pensé que no hacía falta. Pero, obviamente lo que tiene y lo que tuvo el psicoanálisis de haber sido vanguardia en todo esto, es en haber captado el tema de la importancia del cuerpo de la madre, el tema de la importancia de los agujeros de intercambio, las zonas erógenas, sobre esa base la constitución de las pulsiones del propio cuerpo, yo acá lo expresaba en las discusiones, yo disiento con Lacan en el sentido de que no existe la pulsión de dominio. Freud sostiene la pulsión de dominio sobre la base de asentarla en la masa muscular. Y creo que justamente Damasio nos hace volver a esa idea y bien nos hace volver a esa idea. Cualquiera que haya sido dominante en su vida, sabe el peso que eso tiene. Y el dominado también. Entonces me refiero a la cuestión muy compleja efectivamente neuro corporal, cerebro corporal. Hay una cosa ahí de Freud que es interesante, y que por ahí entraría en discusión dentro de esta cuestión en el Proyecto que cuando Freud habla de magnitudes de excitación externa se refiere incluso a las excitaciones que vienen del propio cuerpo. O sea que en ese punto para Freud, el cuerpo es externo al cerebro. Yo sé que no lo dijo en el sentido esquemático de cuerpo por un lado y el cerebro por otro, pero es interesante la idea. Porque si bien son un conjunto cuerpo cerebro, son un conjunto a la vez sobre la base de que también son funciones diferentes.
Silvia Sisto: -Me quede con esto de cuerpo y cerebro, me acorde de una chiquita que vi hoy en un acto escolar que me impresionó, una nena que tuvo un accidente, y digamos su cuerpo está muy dañado neurológicamente, pero su cerebro no, con lo cual está muy conectada con sus compañeras contenta, riéndose, participando dentro de lo que podía. Va a recuperarse, lo que pasa es que hoy por hoy está en la escuela con un casco de esos de bicicleta porque, bueno, fue operada y bueno, no puede caminar…Pero su cabeza anda bastante bien por lo que parece. Pensaba en esto de no es una dualidad pero a la vez son funciones distintas cerebro y cuerpo. Y después otro chico que me tocó atender en un centro de estimulación con daño cerebral muy grave y un cuerpo muy sano, en el sentido de las funciones de los órganos. Y bueno, una planta.

S. R.: Sí, justamente en esa chica en lo que van a poder apoyarse los fisioterapeutas es en el cerebro para la recuperación del cuerpo. Bueno, de paso les digo que no cité a Silvia en la clase, pero porque la clase de Silvia en sí es un conjunto que se retroalimenta. Entonces extraer algo para traerlo acá era muy difícil, pero obviamente me parece muy interesante todo lo que ella va planteando ahí, especialmente en relación al autismo.

S. S.: -Claro hay muchas cosas que vos, a mí me da la sensación, que vas más allá en esto de la espícula. Porque yo te escuche y pensaba, si hay un pruning vacío, una poda, suponte podas la selva, hay un incendio no sé, no queda una planta. No sé si lo que va a regenerar son espículas. No. O sea que si hay un pruning invasivo que está de hebefrenia, sigo pensando que no va a poder ser...Claro. En cambio me pasó con  una paciente que yo hablé en mi clase. ¿Mariel te acordas que es la paciente que trabajamos juntas? Que yo no me acuerdo qué conté de ella. Pero era una chica que tuvo un brote esquizoparanoide y que escribía unas poesías donde relataba la cuestión del vacío. Pero no era metáfora… En la clase hablo de ella. Donde la función metáfora no estaba allí. Si la posibilidad de contar de su vacío. Es muy interesante el trabajo que estamos haciendo. Está tomando medicación. Está mucho mejor. Pero la función de la metáfora nada. Pero el otro día, ella hace un año que deposita los honorarios que me tiene que pagar a mí en una cuenta bancaria y me manda un comprobante de transferencia. Yo siempre que lo veo me da cómo cierta gracia pero bueno, yo no digo nada. No digo nada justamente porque en ella decir algo ahí…probablemente la irritara, no iba…claro. Y el otro día me manda una mail con el comprobante de transferencia y escribe. Te mando el comprobante de transferencia. “¡Lo que estoy diciendo! Me acabo de dar cuenta. Qué gracioso ¿No?” Primera vez que en ella algo…Yo no se si es metáfora, pero ahí cruzó. Uno diría ahí…Y eso viene pasando hace un año te diré.

S. R.: -…Captó la metonimia. Claro porque no te olvides que en la metonimia también tenés la parte por el todo. Treinta velas, velas vienen en el horizonte, en lugar de barcos. La palabra transferencia tiene una cantidad significados para la gente común, y al cual se agrega un significado para los psicoanalistas y los psicoanalizantes. Ella lo que capta es ese desplazamiento ahí… Claro es muy importante igual. Indica una mejoría.

L. L.: Otro cruce, ahora que Silvia trae este caso que sería interesante investigar, sobre todo para los psiquiatras, que si se está planteando que la hebefrenia produce un pruning sería lógico pensar que cada brote esquizofrénico lo que está produciendo es un pruning. Cuando hablamos de que hay deterioro, que cada brote produce deterioro es, qué se yo observable el clínico, un clásico. Casi diagnóstico, cuando ve un brote y si uno a posteriori observa deterioro, uno confirma un diagnóstico de esquizofrenia. Hasta que no encuentran deterioro, uno dice y bueno no sabemos muy bien. Lo que también sabemos es que la medicación, los antipsicóticos disminuyen el deterioro, y muchas veces hasta lo evitan. Resulta una tarea interesante para investigar, es cómo intervienen los antipsicóticos, más allá de lo que ya se conocen digamos de sobre qué neurotransmisores actúan y de qué manera. Pero cómo es que intervienen específicamente en relación al pruning. Porque eso estaría buenísimo. Yo entro a delirar, pero en los casos de, esto lo digo acá en confianza, en esos adolescentes donde uno está temblando, que no se brote, que no se brote. Porque uno sabe que un brote esquizofrénico a los trece, catorce, quince, es arrasador. Somos varios los que temblamos con esas cosas. ¿Y si se les pudiera dar antipsicóticos preventivamente en el caso de que efectivamente pudieran evitar un pruning? Porque muchas veces uno no los da por todo lo demás que implica un antipsicótico. Por el estigma, el sello, los efectos secundarios, pero si efectivamente tuvieran un factor preventivo en relación a pruning. Ah bueno, ahí es otra cosa qué se yo, valdría la pena. Porque realmente el margen de error, porque nadie puede asegurar eso cuando se tienen variables en juego, nose, esto lo dejo para más los psiquiatras, como una cosa que, por supuesto habrá que investigarlo no es cuestión de andar dando antipsicóticos adolescentes, no estoy diciendo eso, por favor eh.

Mariel Santibáñez: -Ya está más o menos eso, porque todo para los que el DSM 4 dice los trastornos de personalidad…Por eso, ni en los trastornos de personalidad, uno sabe que en el futuro es muy probable que haga una psicosis. A esos pacientes ya se los medica con dosis bajas de  antipsicóticos, y mejoran mucho los cuadros. No es seguido a tan largos plazos pero después nos hacer brutos brotes o los hacen mucho más grandes.

L. L: -Está bien Pero Trastornos de personalidad para el DSM 4 somos todos hasta mi perro más o menos.

M. S.: -No. Es la psicosis…Pero qué…Salvo el trastorno límite, que es ahí el borde, que uno no sabe si se va a caer o no se va a caer. Todos los demás, el esquizoide, el esquizoafectivo, el paranoico, son todas psicosis…

S. R.: -Claro, es interesante lo que planteo Laura y la conversación entre ustedes porque por ejemplo ahí lo que habría que pensar si los GABA que son inhibidores, no juegan esa función… Claro. Todas cosas para investigar. Quieran que les lea la poesía antes de irnos. Yo quiero. Nada de paso la verdad emocionadamente se la dedico a Rodolfo Iuorno, un colega que lamentablemente murió joven, menos de cincuenta años. Y que fue el jefe y en buena medida creador del Hospital de Día, del Alvear. Y en ciernes era uno de los teóricos más importantes de Hospital de Día. Realmente el dispositivo que el había armado era muy importante. Y estábamos justos en el Consejo de Dirección de la Escuela de Psicoanálisis del Borda. El daba Clínica y yo daba Fundamentos de la Teoría Psicoanalítica. Y en la primer clase que dio el la abrió con esta poesía de Konstantin Kavafis, un egipcio pero que escribe sobre los griegos. La poesía se llama Itaca. Y dice así. (Lectura de poesía).









[1] Antonio Damasio: El Error de Descartes
[2] Designación en latín que inventé en algún seminario de hace unos años para señalar los tres confluentes ´que mínimamente confluyen para estructurar a un hablante.
[3] Lacan: Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis
[4] crítica. Del gr. kritik¿, t. f. de -kÕj, crítico. 1. f. Arte de juzgar de la bondad, verdad y belleza de las cosas.
2. Cualquier juicio o conjunto de juicios sobre una obra literaria, artística, etc. 3. Censura de las acciones o la conducta de alguno. 4. Conjunto de opiniones expuestas sobre cualquier asunto. 5. Con el artículo la, conjunto de críticos de literatura, arte, cine, etc. 6. murmuración.
[5] Produzca una condensación entre lo que considero fundamental en La Instancia de la letra… y Lituraterre.

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