Nuevas vueltas al 5º discurso presentado por Lacan
Antes de comenzar la clase les quiero recomendar un nuevo libro que ha sacado Julio Sevares, que es un economista y periodista que va a dar una de las clases en este módulo. También sacó a principios de este año un libro que llamó ¿Por qué cayó la Argentina? Y ahora sacó un libro que se llama “ El capitalismo criminal” que es una investigación sobre esos grupos capitalistas que han aparecido envueltos en defraudaciones, estafas, coimas, asesinatos, etc., etc.. Se los recomiendo, además de que sabe de economía sabe escribir porque es periodista, no como uno que es aficionado.
Antes de comenzar la clase les quiero recomendar un nuevo libro que ha sacado Julio Sevares, que es un economista y periodista que va a dar una de las clases en este módulo. También sacó a principios de este año un libro que llamó ¿Por qué cayó la Argentina? Y ahora sacó un libro que se llama “ El capitalismo criminal” que es una investigación sobre esos grupos capitalistas que han aparecido envueltos en defraudaciones, estafas, coimas, asesinatos, etc., etc.. Se los recomiendo, además de que sabe de economía sabe escribir porque es periodista, no como uno que es aficionado.
Estoy sentado yo otra vez acá, les habíamos prometido que iba a estar el caballero, que como ven está de lo más pintón, se va de joda por ahí y deja la mujer acá, para lo cual me dijo que diera yo la clase porque la anterior no había quedado suficientemente explicada, entonces que explique más. Creo que es todo un pretexto, pero no importa.
No, lo que planteó Abel y creo que es razonable, es que a pesar de que ya en el seminario llevamos como dos o tres clases sobre el tema del Discurso del capitalista, en algunas lo fuimos tocando medio suelto y después, en la última clase del primer módulo ya lo tocamos más en sí. Y en la primer clase, la del lunes anterior, seguí trabajando alrededor de eso con el tema del discurso del capitalista actual. Con eso me estoy refiriendo no a todos los capitalistas, sino especialmente a esas grandes corporaciones que están concentradas en el negocio financiero. Cuando hablamos del negocio financiero no nos referimos solamente al negocio bancario sino que nos referimos a una nueva modalidad de capitalismo que apareció en la cultura allá por los fines de la década del 80 del siglo pasado, o sea del siglo XX, y que tomó mucha fuerza durante la década del 90. Y que a pesar de no ser mayoritario como capitalismo en el mundo, justamente por su modalidad operacional se fue tornando hegemónico. Es el tipo de capitalismo que se sustenta en las ideas que se dio en llamar de Pensamiento único, tomando una frase de Margaret Tatcher en la década del noventa y cuyos exponentes políticos más importantes fueron, efectivamente, Margaret Tatcher por un lado y Ronald Reagan por otro, en Inglaterra y Estados Unidos respectivamente. Pero que tuvieron una cantidad hijitos en todo el mundo, por ejemplo en la Argentina lo tuvieron a Menem, y a toda la caterva que se movió alrededor de Menem. En Italia tienen por ejemplo a Berlusconi y podríamos seguir así diferentes países. No es ese el objetivo, pero les hago estos nombres, les cuento esto en cuanto a la descripción fenoménica de la cuestión para que ustedes tengan idea de que les voy a hablar ya después de un modo más formalizado, apoyándome en las elaboraciones de Lacan allá por 1972. Fue en ese entonces, como si él hubiera de algún modo, sospechado que se venía eso sobre el mundo. Entonces cuando en la clase anterior hablo sobre eso Laura Lueiro hace una intervención en relación a la cuestión de cómo podemos pensar que sigan girando los discursos, si el discurso del capitalista se tornó hegemónico ¿ por dónde funcionaría la castración en relación a ese discurso? La cuestión, yo no me acuerdo si lo llegaste a plantear, pero la cuestión del signo del amor como signo de la castración. Entonces sé que ahí Abel me habla, me hace el planteo y me doy cuenta que tiene razón y que si para alguno de ustedes tal vez pueda resultar un poco pesado que aparezcan como repeticiones en lo que hoy voy a hablar de cosas ya escuchadas, no obstante creo que vale la pena porque nos estamos metiendo en una temática que no sólo hace al nudo de la época actual de la cultura sino que desde ese nudo en realidad nos permite leer un panorama bastante más amplio que sólo ese nudo y que engloba a otra serie de discursos amos. Y que son discursos que no han fenecido, no son discursos que ya no están, sino que en todo caso que están de una manera, a través de una combinatoria determinada pero que siguen funcionando en las sociedades. Cuando me di cuenta de que lo que iba a hacer esta noche era eso, también pensé que no va a estar de más que vuelva sobre el tema del nudo borromeo que, especialmente para varios de ustedes, es chino básico. ¿De qué me habla este tipo cuando habla del nudo borromeo? Pero sin embargo la importancia está justamente en poder cruzar lo que conceptualizó Lacan con el nudo borromeo con lo que conceptualizó Lacan con la cuestión de los discursos. Para decirles esto me baso tanto en una experiencia ya recorrida a través de este momento de mi vida, dónde el tema de los discursos lo empecé a trabajar fuertemente en 1980 y el tema del nudo lo debo haber empezado a trabajar fuertemente algo así como en 1987, una cosa así. Primero lo empecé a trabajar como cualquier tipo que se pone a estudiar Lacan, a ver de qué me habla éste con estas cosas raras, extrañas. Después más o menos creí entender, digamos como alumno, de qué estaba hablando Lacan y luego a medida que iba pasando el tiempo y eso se me iba trasminando, diría, en mi cuerpo y mi cabeza, se me empezó a aparecer frecuentemente. Digamos, cuando pensaba sobre qué había pasado con tal o cual paciente en tal o cual sesión de las que me tocaba trabajar como psicoanalista, o a veces en períodos enteros de trabajo. Cuando me di cuenta de eso, eso me llevó también a observar como eran pacientes diferentes y diversos, a pensar que tenían que relación con fenómenos sociales que estaban expresando puntualmente a través de su singularidad de sujetos, pero que al mismo tiempo advertía que, con las diferencias del caso, abarcaba a sectores de mis pacientes. Como me doy cuenta que les estoy hablando muy en abstracto, muy en general, voy a algo más concreto, por ejemplo: me tocó seguir durante muchos años a un señor que de ser un muy buen obrero metalmecánico diría el sindicato, termina siendo dueño de una empresa, de una PYME, pero de las PyMEs grandes, en el rubro que él operaba.
Ustedes saben que, en ese sentido, por ahí la dimensión de una empresa no depende solamente de la cantidad de mano de obra que emplea, ni tampoco solamente del capital que dispone, sino por ejemplo, de la incidencia que el producto que produce tiene en la sociedad para la cual está produciendo. Bueno, a mí me tocó seguir a este señor durante muchos años y eso me dio toda una experiencia en relación a observar a un tipo de capitalista, digamos. Después eso me permitió confrontarlo, digamos compararlo con otros capitalistas que en sectores distintos de la producción, presentaban sin embargo desde el punto de vista estrictamente formal, una serie de puntos en común con este hombre. En otros momentos me ha tocado trabajar con gente que trabaja en las Bolsas de Valores. Uno de ellos, un capitalista dentro de la bolsa de valores, otro un empleado dentro de la bolsa de valores. Digamos, ambos agentes de bolsa pero con esa diferencia entre ellos. El empleado al mismo tiempo tenía relación, trabajaba bastante asociado digamos, a la cúspide de uno de los bancos importantes acá en la Argentina. Entonces eso también me permitió observar otra modalidad de relación de las singularidades de esos sujetos con el capital, la producción, la comercialización, etc. Bueno, experiencias de esa índole, relacionadas a la vez con lo que había estudiado de Lacan, es lo que me fue impulsando a mí, a partir del año 1994 si no recuerdo mal, a tratar de ir volcando, digamos, el análisis de esa experiencia en intentos de formalización que apoyados en lo que Lacan ya había planteado, buscar e ir más allá. Ustedes hoy, van a ser víctimas de eso.
Para eso quiero partir de contarles también algo de la última vez que Lacan hizo una exposición en público, exposición que hizo sabiendo que su vida tenía un límite corto. O sea él sabía que padecía de un cáncer de intestino que había decidido no operarse y por lo tanto que no tenía muchos meses más de vida. Efectivamente se murió, yo no recuerdo bien, pero se murió más o menos al año de esa exposición, un poco menos. Él hace una exposición muy breve en Venezuela, en un congreso que se hizo en Venezuela que duró unos diez minutos (la exposición de él) donde habla, hace como un paneo sobre su su vida participante en el movimiento psicoanalítico en comparación y en relación con Freud. En esa intervención, de diferentes modos hace alusión a los acuerdos que tuvo con Freud, también los desacuerdos y el relanzamiento de su trabajo conceptual a partir de esas dos cuestiones y de su relación con la clínica. En esa exposición planteó de que mientras Freud a nosotros nos dejó el esquema del yo y el ello, con inclusive, ustedes los psicoanalistas recordarán el gráfico del yo y el ello con súper yo, yo, ello, los entrecruzamientos, las mixturaciones, el ojo, etc. Dice “yo en lugar de esa bolsa de gatos”, más o menos es la expresión de él en aquel momento, “les dejo a ustedes mis matemas y mis nudos”. Con lo cual, primero: ustedes se darán cuenta que es discurso legado, un testamento, es un discurso testamentario de desde el punto de vista conceptual y en ese discurso testamentario, él, que recorrió un montón de lugares, dibujos, fórmulas, etc. etc. a través de toda su historia de veintipico de años de producir fuertemente en el terreno conceptual, elige dos cuestiones los matemas y el nudo Borromeo. Matemas, le llamaba Lacan a este tipo de escrituras (las muestra en el pizarrón).En ningún momento se creyó que esto fuera matemáticas sino que los llamaba matemas, porque tenían la forma de la escritura matemática, en algún lugar habla de sus matemoides, por ejemplo. Y los nudos, cuando el habla de los nudos habla básicamente de esto (muestra un nudo Borromeo construido con alambres de colores diferentes) y de una serie de nudos que él desarrolla alrededor de esto. Con lo cual nos dice que en su legado no ocupa un lugar fundamental otra serie de presentaciones topológicas que él hizo antes. Desde la más sencilla, digamos, de la relación entre el emisor y el receptor y la resignificación en la emisión de un discurso hasta pasando por las más complejas como pudo haber sido el “cros cup” y otra serie de escrituras topológicas que hizo. Analizando bastante esto me di cuenta que era lógico que él tomara como su testamento eso. ¿Por qué? Porque hay algo básico, que lo hemos explicado en varios momentos de este seminario, que es que Lacan, a diferencia de la mayoría de los psicoanalistas, no entendía la producción del inconsciente como algo individual. Escuchen bien lo que yo digo: la producción del inconsciente, no digo el inconsciente, cada uno lleva su inconsciente, pero la producción del inconsciente para Lacan desde muy temprano fue en relación entre el sujeto y el otro, o sea con la participación de al menos dos inmersos en un tercer elemento el lenguaje que utilizan. Por lo tanto, que la producción del inconsciente es en vínculo social y entonces lo que él toma de la lingüística tempranamente pero lo va a ir trabajando, transformando hasta armar lo que él llama su lingüistería, es que no hay vínculo social si no es a través de la relación de discurso. O sea esta noche, a pesar de que voy a hablar seguramente bastante hoy, pero después van a intervenir ustedes. Y en lo que ustedes intervengan yo podré observar a ver que se entendió de lo que dije y ustedes podrán también observar qué entendieron de lo que yo dije y seguramente alrededor de eso van a surgir una serie de acuerdos, desacuerdos, malentendidos, sobreentendidos, suposiciones de entendimientos falsos, etc. Es en esa sopa, en esa relación que aparecen los equívocos, los lapsus, los actos fallidos, los sueños, las fracturas lógicas, las tonalidades con que se emiten las enunciaciones, las atmósferas que una modalidad de hablar arma, etc.
Es ahí donde el inconsciente muestra sus cartas. Pero eso planteado así, nos dejaría atados solamente a la cuestión de la relación entre lugares, después voy a pasar a explicarlo en el pizarrón y explicitando la participación de los significantes y los efectos de eso. En cuanto al efecto sujeto por un lado y al objeto como producido por el otro. Pero lo que Lacan pesca muy tempranamente, pero si ustedes leyeran ese trabajo y lo compararan con los trabajos de veinte años después, veintidós años después, verían que era, que sé yo, eran sus balbuceos sobre su teoría, es que la experiencia humana, la práctica humana se produce en relación a tres dimensiones que encuentran sus raíces en el lenguaje y en la lengua. A esas tres dimensiones Comenzó a referirse en 1953. Dio una conferencia que llamó “ Real, simbólico e imaginario”. En el título de la conferencia ya dice claramente lo que va a plantear, pero si uno la lee, ahí simbólico todavía era una mezcolanza bastante fuerte. Imaginario estaba muy atado al estadío del espejo, estaba muy reducido, diría al estadío del espejo. Y real era un concepto en elaboración. Vieron como cuando uno va por la calle y dice “sabrá disculpar las molestias ésta calle está en construcción”, bueno, así estaba el concepto de lo real para Lacan en esa época. Después vino todo un recorrido, pero para mí esa base de los tres registros es el fundamento de lo que aporta Lacan a la cultura, es lo que no apareció en ninguno de los pensadores anteriores a Lacan. Y es muy importante, porque es justamente lo que da lugar tanto a la existencia del inconsciente así como condiciona en sus fundamentos al malestar en la cultura. Freud plantea el malestar en la cultura como un efecto de la necesidad de que para que una sociedad se desarrolle más o menos civilizadamente, hacia falta que se inhibieran las pulsiones, se reprimieran los deseos para que se produjera la relación de demanda entre unos y otros. Ustedes piensen lo siguiente, especialmente los que no son psicoanalistas, para los que somos psicoanalistas esto es más fácil de seguir, digamos.
La definición que hace Freud de deseo, de necesidad, de demanda, en escritos separados y sin darle justamente un tinte de definición sino de referencias luego Lacan las va a tomar como una cuestión fuerte a ser definida. Por lo tanto lo que les voy a dar ya son definiciones del teórico. Las palabra deseos, demandas, se pueden usar por ahí, más o menos como sinónimos en el lenguaje vulgar, no tanto pero casi. Necesidad y deseo muchas veces se confunden en el lenguaje vulgar ¿verdad? El teórico plantea una definición ahí, y esa definición es muy importante. La necesidad es lo que tiene estrictamente que ver con la pura biología, digamos, por lo tanto ninguno de los seres humanos funcionamos en base a la necesidad, porque la necesidad como tal está pervertida en el ser humano simplemente porque habla y se forma desde la relación de piel y de habla lo cual lleva a eso que les contaba en la clase anterior sobre que Marx plantea en el primer capítulo de “El capital” de que las necesidades pueden nacer tanto del estomago como de la fantasía. Nosotros, ya releyendo desde Lacan, diríamos los deseos pueden nacer tanto del estomago como de la fantasía pero siempre van a ser efecto de que están atravesados por el lenguaje, por lo tanto ya no son una necesidad pura. Dicho en términos sencillos: Mientras tenga pasto en su territorio, un caballo come la cantidad de pasto que tiene que comer y no come más, ni menos ¿verdad? El ser humano, varios de los que estamos somos una buena expresión, no nos conformamos con comer nada más que lo que necesitamos ¿verdad? Después vamos al nutricionista, bah, las cosas, las tonterías de los seres humanos. Sobre el deseo como deseo inconsciente Freud hace una diferencia, ya temprana, en “ El análisis de los sueños” entre deseo y anhelo. Él coloca el anhelo más en el terreno de la conciencia, del preconsciente, el deseo lo deja para el terreno del inconsciente. También es una operación del teórico, porque en el lenguaje vulgar de la calle deseo y anhelo dicen más o menos lo mismo. El deseo inconsciente desea. Desea a partir de eso que al sujeto le falta y que está causando su deseo, por eso el deseo inconsciente es absolutamente narcisista. Le importa un bledo de los demás.
El deseo desea, por eso alguno de ustedes más de una vez se habrá sorprendido al encontrarse con una expresión en su cabeza en medio de una discusión con un hijo donde ha dicho: “¡ma que se muera... !” ¿No? “Bue, no, una forma de decir...” y uno se tranquiliza. No, no, no es una forma de decir, uno en ese momento desea que el hijo se muera. Por supuesto, uno no agarra, saca la pistola y lo mata, a menos que esté loco ¿verdad? Sino que, justamente ahí viene, la labor represiva de la cultura, de la civilización, etc, y uno verá cómo va haciendo para que el deseo de uno de que ese hijo no funcione de esa manera que a uno lo molesta tanto no desemboque en una tragedia. Y ya estamos ahí instalados en el terreno de la demanda, la demanda, a diferencia del deseo, sí necesita del otro. Digamos, si yo le demando algo a alguien, voy a tener que tener en cuenta hasta dónde esa demanda va a poder ser efectivizada, y por supuesto no pensemos como las almas bellas, de que entonces yo soy un señor cortés que voy a decir: “no, a ver, algo que no te moleste, etc, etc” porque no es así . Sino que la política, que ya nace en la célula familiar mínima en la cual cada uno de nosotros nos criamos. Entonces la demanda de la criatura a sus padres, la demanda entre los miembros de la pareja parental en relación a cuestiones de ellos, las demandas de la pareja parental a sus hijos, etc., reconocerán no sólo la razonabilidad, digamos, de las demandas sino que también tendrán que reconocer las correlaciones de fuerza, el apoyo que tiene del otro para llevar adelante su demanda, el apoyo que no tiene, etc, etc, y la criatura también se va a ir formando en ese caldo, sumado a los rasgos personales de cada uno de los integrantes (más concesivo, más autoritario, más o menos egoísta, etc.). Entonces, en ese caldo, en esos vínculos sociales, relaciones de discurso, ocurre además una complicación más, por si fueran pocas (yo hoy voy a hacer como el vendedor de subte: voy a empezar a sacar una trás de otra, pero en lugar de venderles cosas para vuestro gusto, les voy a vender complicaciones) que es que la palabra no produce, a pesar de la sensación que nos produce muchas veces, no produce un claro significado de lo que quiere decir. Por la sencilla razón que una palabra puede querer decir muchas cosas, inclusive a veces, cosas contradictorias. Freud escribió un trabajo, que después los lingüistas lo desmintieron pero que en lo nuclear creo que tiene razón, Sobre el sentido antitético de las palabras primitivas, se llamó el trabajo. Los lingüistas después demostraron que las palabras primitivas no tenían sentido antitético, pero nosotros podemos demostrar que muchas palabras que usamos vulgarmente pueden tener sentido antitético, o sea que la tesis de base, vale. Entonces las palabras pueden querer significar muchas cosas, entre ellas cosas contrarias entre sí. Pero no sólo eso, sino que además el efecto de significación de las palabras resultará de en qué combinatoria de palabras se las emita. Lo que agrega una complicación más, pero además, la otra complicación, es que mientras yo estoy emitiendo una palabra desde lo que quiero significar, otro puede estar escuchando esa palabra desde lo que a él le interesa que se significara. Ojo, no porque lo haga a propósito, perversamente, sino sencillamente porque cada uno de nosotros no tiene otra forma de pararse que no sea en función de su narcisismo. A veces se utiliza entre los psicoanalistas la palabra narcisista como un insulto, es una tontería. Después uno puede entrar a discutir si un tipo es excesivamente narcisista, o al revés, tiene el narcisismo maltrecho, un montón de discusiones, pero si no fuéramos narcisistas no sobreviviríamos, cada uno vive desde ahí.
Entonces en esta cuestión, de que las palabras pueden querer significar una cosa y sin embargo aparecer significando otra, es que se presenta la cuestión de los tres registros. La palabra puede funcionar significando algo y producirse un convenio adonde para todos nosotros eso signifique eso y ninguna otra cosa. Lo más típico, podrían ser, los carteles callejeros, los carteles viales, los carteles que ordenan el transito callejero, donde ya no sólo se han producido convenciones nacionales alrededor de eso, sino convenciones internacionales. Ustedes pueden ir por cualquier país manejando un automóvil, pueden no saber el idioma de ese país, pero van a ver determinado tipo de símbolo donde ustedes ya van a saber que tienen que parar, que pueden seguir, que no se pueden inclinar hacia tal lugar, que acá no se dobla, etc. Ahí tienen ustedes una función simbólico imaginaria, se produce una relación de punto a punto y sin fisuras, entre lo que se dice y lo que se quiere decir. Pero eso puede funcionar de una forma mínima nada más, por ejemplo en esos carteles viales, pues cuando se entra hablar la cuestión se acompleja. Por otro lado eso, me empecé a acordar unos chistes gallegos, eso produce sus dificultades también, porque uno puede decir algo y si se lo toma literalmente puede estar equivocado. Sobre esa base operan mucho los chistes “de gallegos”, sobre la toma de la liberalidad. Pero produciendo efectos muy contrarios. Ustedes conocen el famoso chiste donde un gallego va manejando por Libertador escuchando la radio y oye: “Ultimo momento: cuidado en la calle Libertador, hay un loco que va de contramano” Y el gallego dice: “¿ cómo un loco?, que son como mil”. Se dan cuenta que ahí la emisión al decir “hay un loco que va de contramano”, no establece para que lado es la mano, por lo tanto efectivamente el que escucha tiene derecho a pensar que no es uno, que son mil, y que el que va por su mano es él. Entonces, el equívoco, el malentendido es lo que da lugar a lo que nosotros llamamos la función simbólica del significante, donde el significante va a utilizar de su disposición a la significación múltiple. Freud hablaba de la multivocidad de la palabra y de su capacidad de combinarse con otras. Capacidad que trabaja sobre aquello en relación a lo cual lo imaginario, o sea aquello que coagulado en un sentido en determinado momento fracasa. Cuando fracasa lo que se produce es el desconcierto, es el no saber que hacer con ese fracaso ante el cual se está. En ese momento, a eso lo podemos llamar lo real, sobre eso trabaja toda esa disposición de combinatoria y de plurisemia del significante para retrabajar la cuestión y tratar de reencauzarla de alguna manera.
Bueno, lo que en los últimos años de su existencia pesca Lacan es que esa relación entre simbólico, imaginario y real tiene además una forma particular, que es esta que ustedes ven acá (Muestra tres círculos articulados borromeanamente) . Ustedes ven acá una figura donde las tres arandelas se autosostienen ¿qué quiero decir con esto? Que si yo agarro y saco una de las tres arandelas, como ven todo el nudo se viene abajo. Eso tiene que ver con cómo van pasando entre las arandelas cada uno de los hilos. Entonces esto tiene mucha importancia para nosotros los psicoanalistas en la práctica clínica, por ejemplo la esquizofrenia, que es una de las enfermedades más terribles que desde el punto de vista psíquico suelen afectar al ser humano, justamente cuando están en pleno brote, cuando están en plena producción, llamémosle así, lo que ocurre es esto, que se desarticulan los tres registros, y lo que echa a rodar hasta, si no logra ser detenido es lo imaginario. Echa a rodar en el sentido de que se escapa, es cuando ustedes van a los manicómios y encuentran por ahí esas personas que no saben hacer otra cosa que emitir gruñidos o monosílabos que ya no hablan digamos en el sentido humano del término, cuando los encuentran en ese estado es muy probable también que los encuentren sin control de esfínteres por ejemplo, o sea que hasta las funciones más primarias de esa persona han caído. Pero esto que lo observamos así en la práctica clínica con sujetos singulares, en cierto modo, por lo menos esa es una de mis preocupaciones, lo estamos comenzando pasar en la práctica social. No lo leí todavía, vi que había un artículo en Viva sobre la villa 31. No sé que dirá el articulo, pero en general los periodistas tienden a generalizar, justamente la generalización pierde de vista esta cuestión: que en realidad esta estructura compleja hace que no se pueda observar lo que le pasa a la gente si no es en relación a particularidades y no a generalidades. Pero lo que estamos observando en la Argentina es un estallido inusitado del aumento de la delincuencia urbana, pero con una diferencia muy grande con lo que fue la delincuencia urbana tradicional. ¿Qué quiero decir? Que hasta hace diez años más o menos, había “oficios” de delincuente. No cualquiera se metía en cualquier cosa, estaban los “escruchantes”, perdón por los extranjeros que hay acá. “ Escruchantes” nosotros le llamamos a los que hacen robo con “fractura” ruptura de puertas, de paredes o ventanas, o lo que fuere. Estaban los carteristas, o sea los que se dedicaban a la sustracción de carteras, estaban los descuidistas, “los ladrones de caño”, que eran los asaltantes a mano armada. El secuestro acá casi no había aparecido, hay uno que se recuerda en la tradición: el del hijo de Ayerza, que ocurrió allá por el año treinta, más o menos, y que apareció muerto en un maizal, obviamente no es de este momento de la cultura.
Pero quiero decir no tenía la difusión que tiene ahora. Podríamos seguir nombrando oficios, dejo los “oficios” sino demostraría demasiado mi experiencia en eso, no quiero. Y digo: ahora, lo que llama la atención es que justamente hay mucha delincuencia que ya no respeta las ramas en las que trabaja ni tampoco los códigos de la rama en que trabaja. Porque ojo: cada uno trabajaba en una rama por el tipo de goce que le producía. Si ustedes ven la película “Nueve Reinas”, el goce que produce al estafador el estafar, para él es mucho más valioso que la cantidad de dinero que estafó, el goce que le produce a un asaltante de bancos asaltar el banco y salir bien es mucho más grande, eso se ve bien en “Plata quemada” otra película argentina, por el echo que llevó a cabo y cómo lo llevó a cabo que por el dinero que ganó, que en esa ocasión terminaron quemando. Es un episodio real, yo me lo acuerdo, de la crónica policial argentina. Cada uno de ellos procedía conociendo el código penal, sabiendo entonces que normas infringía y cuáles no infringir para que si lo agarraban no le aumentaran la pena. Todo eso es lo que de diez años para acá va cayendo y va llevando a situaciones donde se producen asaltos donde primero se mataba al asaltado porque, supónganse, no tenía dinero encima o porque tenía muy poco dinero, pero actualmente ya está habiendo muchas situaciones donde los matan tengan dinero o no, donde muchas veces lo matan, salen corriendo y le dejan encima el dinero. De este tipo de noticias policiales, ustedes habrán leído en los diarios muchas. O sea, lo que se está produciendo en una parte de la población es un grado de degradación que indicaría que en esa parte de la población hay una falla muy grande en la relación entre los tres registros. Y que esa falla muy grande en la relación entre los tres registros los transforma a ellos mismos, digamos, en tipos excesivamente reales. Absolutamente impredecibles, no posibles de calificar dentro de alguno de los códigos conocidos.
Planteado esto como introducción, paso a lo siguiente. Lacan termina haciendo una síntesis en el año 1970, o sea 17 años después de esa conferencia que dio sobre real, simbólico e imaginario. Termina armando cuatro discursos que son los del amo antiguo, el universitario y otros dos que no escribí acá porque hoy no me voy a referir a ellos, que serían el de la histérica y el del analista. Luego, en el año 1972, escribe este discurso (lo vuelve a señalar en el pizarrón) que llamó del capitalista. Eso me permite a mí después seguir trabajando y armar este discurso que yo llamo del amo entre causante y encausado, ahora vamos a ver qué les quiero decir con todo esto que por ahora para ustedes es un galimatía. Primero: lo que se plantea Lacan a partir de que empieza a metematizar los discursos es que en la relación de discursos que se puede producir entre dos personas o se puede producir entre una persona y quinientos, o se puede producir entre un buró de diez personas y una masa de dos millones, no importa, pero quiero decir donde fundamentalmente hay dos lugares, un lugar que vamos a ubicar acá, agente otro verdad producto o sea arriba a la izquierda el primero, al cual el va a llamar “el lugar agente” porque agencia, en el sentido que un agente pone en movimiento algo, pero también en el sentido que un agente pone en movimiento algo no por su propia cuenta sino en todo caso en representación de otra cosa, digamos. ¿ cuál es la otra cosa? A mi modo de ver para Lacan en esos esquemas, lo que hace que llame a esto agente, la otra cosa es que en la relación de discurso se produce una articulación necesaria entre los cuatro lugares que al mismo tiempo que le da una cierta libertad al agente para proceder, es una cierta libertad que queda dentro de determinados límites que la propia estructura del discurso le pone. Después lo vamos a ver muy claro cuando demos ejemplos de cada uno de estos amos. Por eso mismo, ya avanzado más allá del setenta, él dice que este es un lugar de “semblant” que en todos los discursos, los de amo y los no de amo, es un lugar de “semblant”, o sea es un lugar de apariencia.
En realidad Lacan va a terminar considerando, en los últimos años de su vida, que todos no somos más que apariencia, excepto en el momento del goce. En ese momento sólo somos eso, lo que goza, digamoslo así, pero eso es intransmisible, porque eso nos ocurre a nosotros en nuestro propio cuerpo, aunque haya lugares donde él dice que el goce es fuera de cuerpo, digamos, pero el fuera de cuerpo está referido, a mi modo de ver, a que el goce en definitiva reconoce como causa al significante, para decirlo sencillo como lo dijo él en Encore, para decidir gozar de algo hay que saber cómo se llama y dónde está. Y cuando gozan de ustedes, gozan de una parte de su cuerpo que también tiene nombre y esta en algún lugar. Entonces el significante por eso funciona indicador y límite.
Pero los que me lean no van a poder nunca saber qué me pasó a mí en mi cuerpo en este momento. Esto es muy evidente especialmente en relación a las mujeres, pero también en relación a los hombres. La diferencia de los hombres es que tienen un lugar de goce muy exquisito que es el pene, que las mujeres no tienen, y que hace que su goce se concentre mucho ahí, en el acto sexual. En cambio en las mujeres se desplaza por todo el cuerpo, cuando tienen la suerte de no estar excesivamente neuróticas. Por eso Lacan suponía que las mujeres pueden gozar mucho más. Bueno. Lugar del agente.
Lugar del otro. Le puso ese nombre nada más: otro. Cuando lo escribe, lo escribe con minúscula, con lo cual no está diciendo lugar del otro con minúscula, hay toda una jerga lacaniana que los que no tienen experiencia en eso no, no tiene mucho gollete tampoco hoy explicárselos demasiado. Pero Lacan habla de otro con minúscula, o de un Otro con mayúscula. Cuando habla de los discursos acá (señala arriba y a la derecha del observador) pone otro. Es el lugar hacia donde la emisión del agente se dirige, eso reconoce que se va a producir un producto. Ese producto lo va a producir el otro, el agente invita, el otro opera y el producto se produce. Y ese producto del otro queda en disyunción con lo que está soportando al agente. Lo que está soportando al agente es su verdad. Ningún discurso habla de “nuestra verdad”, de la verdad de los que estamos escuchando, de la única verdad que está hablando es de la verdad del que está emitiendo. Por eso queda en disyunción con lo producido, y esa es una de las grandes paradojas del vínculo social y del lazo del discurso por lo tanto. Mientras el producto lo produce el otro es al servicio de la verdad del agente. Esos cuatro lugares son fijos para los cuatro discursos, para todos los discursos que uno pueda después escribir. A partir de ahí, Lacan en su primera emisión escribe cuatro discursos: el discurso del amo antiguo, que es este que ustedes ven acá. Después lo explico para los que son de afuera, el discurso del universitario, que lo define como del amo moderno y ahí está usando la palabra con estrictez, él se está refiriendo a la modernidad, él está escribiendo eso en el momento en que está en su “apogeo” la sociedad de consumo y por lo tanto ya se está entrando a algo que ya no es la modernidad. Después van a empezar a hablar de la postmodernidad, de la sociedad postindustrial, hay una serie de formas de llamarlo, no importa, pero ya no es la modernidad. Él dice que el discurso del universitario es el discurso del amo moderno, voy a ir ejemplificando, para que ustedes se vayan ubicando. Ubiquen al discurso del amo antiguo más o menos como lo ubicaba él, él lo ubicaba en relación a los amos griegos. O sea a los amos de la Grecia de Atenas o de Esparta para dar un ejemplo. El universitario, si queremos ubicarlo acá tuvimos un prototipo que trabajó durante bastante tiempo de eso, ahora anda un poco alicaído, pero tenemos otro que está tratando de tomar ese lugar. El que está alicaído es Cavallo y el que está tratando de tomar ese lugar es López Murphy. Son señores que, también podríamos ubicar a algunos amos marxistas en ese terreno a algunos jefes de partidos comunistas que han estado o están en el poder, y que son señores que dan sesudas explicaciones científicas sobre porque una sociedad tiene que funcionar de una manera determinada y no puede funcionar de otra. Pueden hacerlo o a través de sistemas muy complejos, como por ejemplo el capital de Marx hasta tonterías que uno se pregunta ¿cómo la gente no se da cuenta que son tonterías?, pero bueno, son tonterías, como las de López Murphy, donde él dice: la sociedad funciona según la aritmética. Todo es una cuestión de suma, resta, división y multiplicación. A lo sumo irá hasta la potenciación y la raíz cuadrada, de ahí no sale. Pero producen una sensación, mientras están vigentes y son hegemónicos, una sensación muy fuerte de que verdaderamente disponen del saber necesario para que la sociedad finalmente llegue a ser feliz. Saber como el matema lo indica siempre les viene de los significantes de otro previo.
S2 otro
S1 $
Son discursos que van, vuelven, y que tienen su peso. En el 72, el grueso de las sociedades estaban en apariencia fuertemente asentadas en el discurso del amo moderno, el discurso universitario, tanto en el régimen socialista como en el régimen capitalista. Estaban digamos, por lo menos fogoneadas por economistas que “sabían” muy bien lo que querían y a dónde iba el mundo; claro, cada uno desde su versión, pero era así. Creo que Lacan lo que pescó, él lo dice en el trabajo donde toma eso, es que esa fiebre consumista que se había desatado en esos años era absolutamente contradictoria, con las ideas de razonabilidad que planteaban cualquiera de las variantes económicas modernas de esa época, fueran de derecha o fueran de izquierda, pero que, supuestamente, planteaban algún tipo de razonabilidad. Entonces escribió este discurso donde inscribe algo que iremos viendo después, y donde parecería preanunciar lo que está viviendo la sociedad actual. No sé si lo que va a vivir dentro de un tiempo, eso veremos, pero lo que está viviendo la sociedad actual, después veremos cómo. Cuando escribe este discurso, que es un quinto discurso, porque él la primera vez que toma el tema de los discursos que es en “ El reverso del psicoanálisis”, él plantea que hay cuatro discursos y nada más que cuatro discursos y que además los discursos pueden girar, por eso son cuatro, digamos, pero lo que no pueden es cambiar los elementos de lugar. Cuando plantea el quinto discurso, el del capitalista, cambia los elementos de lugar, porque ustedes fíjense que mientras en el discurso del amo él había puesto el S1 en el lugar del agente, y el sujeto del inconsciente, digamos, en el lugar de la verdad, acá produce una inversión: manda el sujeto deseante, el sujeto del inconsciente al lugar del agente y pone al S1 en el lugar de la verdad. O sea viola la propia norma que él había planteado en “El reverso del psicoanálisis”.
Creo que esa fue una de las razones por las cuales no escribió más este discurso durante muchísimos años. Habló sí, pero no volvió a escribir la fórmula en el resto de su vida. Murió nueve años después de haberlo lanzado, así que tuvo tiempo para volver a escribirlo. La gente que estaba con él tampoco habló de ese discurso en todo ese período. Ese discurso de casualidad llegó a mis manos gracias a Raúl Sciarreta, lamentablemente muerto ya. Cuando lo leí quedé desconcertado. Pero como tenía mucha confianza en Raúl, sabía que no era un tipo que iba a andar engañando, además mostró la copia mimeográfica de donde había sido levantado, los datos, averiguamos, escribimos, me acuerdo, a Finzi Conti que dirigía el lugar donde habían planteado esta cuestión. Porque me di cuenta de que planteó un discurso que supuestamente violaba sus propias normas. La verdad es que entré en confusión y el que estaba conmigo trabajando eso ( en esa época trabajábamos juntos José Grandinetti y yo, José Grandinetti fue el que lo trajo y tradujo el texto porque estaba en italiano) Nos quedamos perplejos; y no nos animamos, la verdad, a abrir la boca durante bastante tiempo porque decíamos para abrir la boca hay que tener argumentos. Lo único que hicimos fue publicarla en el Psyche de esa época, porque sabíamos que existía, que no nos podían decir que era un invento nuestro, etc., y punto, ahí quedamos. Con el tiempo y de a poco fui tratando de pensar la cuestión, a esta altura son varios dentro del movimiento psicoanalítico los que tratan de pensar la cuestión, que yo me acuerdo ahora, que me vienen rápido a la memoria: Jorge Alemann, Slavo Sizek, Isidoro Vegh, yo, etc. Y cada uno de nosotros da argumentaciones, lee de una manera diferente este matema ¿por qué? Entre otras cosas porque en realidad Lacan no planteó una manera de leerlos, solamente dijo: Bueno, fíjense que con un simple cambio de lugar les armo este discurso, que es el discurso del capitalista. Ni siquiera lo llama del capitalista actual, él lo llama del capitalista. Dice que va rápidamente, es el discurso de la consumición, de la consumación que va rápidamente a su consunción, más o menos eso es lo que él dice. Con esos elementos entonces trato de seguir reubicándome.
De ahí vuelvo, porque sino... supongo que ya esta altura deben tener una melange en la cabeza, pero bueno, no queda otra. Cuando yo empiezo estudiar el tema del discurso del amo antiguo y lo empiezo a comparar con lo que sé de marxismo me doy cuenta que Lacan comete, desde el punto de vista digamos de la fidelidad un error ¿por qué? Porque Lacan ubica este discurso en la época de la Grecia antigua, en la época de Sócrates y plantea que la a, lo que él va a llamar el plus de goce es equivalente a la plusvalía de Marx.
S1 S2
$ a Discurso del amo antiguo
La plusvalía de Marx, Marx plantea como condición para que se produzca, justamente a la revolución industrial ¿por qué? Porque fue la revolución industrial la que, por lo que necesitaba cómo relaciones sociales de producción, ese modo de producción basado en el desarrollo de las fuerzas productivas que había traído la revolución industrial, necesitaba que la fuerza humana de trabajo circulara libremente, por lo tanto el estadío de servidumbre de la sociedad feudal, o de esclavismo de otras sociedades obstaculizaba el desarrollo de la sociedad industrial, de la sociedad capitalista. Como consecuencia la producción de plusvalía en la producción industrial. Me pregunté ¿cómo cometió semejante error? Podía ser porque Lacan, no se crean ustedes, todos se lo imaginan a Lacan como un Dios que antes de hablar se leía todos los libros que existían en ese párrafo del cual él iba a hablar y por supuesto no era así porque no hubiera podido vivir. Pero entonces trate de explicarme qué era lo que había pasado, inclusive lo conversamos bastante con amigos marxistas. A mi modo de ver, lo que pasó fue lo siguiente: el plusproducto se produce desde que se sale de la sociedad de nómades de recolectores y pescadores, donde realmente la producción de cada ser humano alcanzaba para sí mismo y punto. Pero cuando aparece (el plusproducto), porque se comienza a utilizar el fuego, se empiezan a usar instrumentos de pedernal, y aparece la rueda, aparece la posibilidad de producir un plusproducto ¿ qué es producir un plus producto? Sencillamente: que el productor produce más de lo que necesita para consumir. Por lo tanto Lacan no estaba equivocado en el sentido de que en la sociedad griega ya había un plus producto. Pero lo que también es cierto es que ni lo griegos ni los romanos podían contabilizar y calcular con precisión la distribución de ese plusproducto, por el tipo de matemáticas que tenían. Recién el plus producto es contabilizable de la manera en que lo contabilizan los capitalistas a partir de la entrada de los números arábigos en occidente. O sea que, probablemente, Lacan acá hace una condensación entre lo que es el modo de producción una vez terminada las sociedades primitivas de recolectores y pescadores y nómades, donde ya empieza a haber ese plus producto y a eso él lo va a llamar amo antiguo. Lo que ahí pesca Lacan es que este matema (señala el del amo antiguo) es el que funda el inconsciente, no porque estén esta rayitas acá en el medio (se refiere a las barras que separan cada piso superior del inferior) como interpretaron algunos, sino porque lo que se produce es una relación directa entre el S1 y el S2 y obviamente se produce un sentido y ese sentido por lo tanto reprime a lo que queda por fuera de ese sentido, por eso Lacan va a plantear que el discurso del amo antiguo es el discurso que funda al inconsciente. Bueno, para los que no son psicoanalistas: Lacan hace una reducción, una sintetización de las funciones del lenguaje y del discurso, a su efecto de sentido, al sin sentido (producido si el significante fuera considerado aislado de otros significantes, con lo que tendría valor equivalente al de las letras) y de fuera de sentido (lo que a pesar del esfuerzo de significación de los significantes enunciados en un discurso, queda sin significar).
Plantea que: entre un significante, que él le va a poner el número 1, pero que recién es significable como 1 por la aparición de un significante dos, que lo va a significar ¿ se entiende la operación?, se va a producir ese sentido. Por eso tienen S1, S2, $ acá (en el piso de abajo a la izquierda de quien lee el matema) que está representando al sujeto del inconsciente, al sujeto bajo represión, al sujeto partido, y acá (piso de abajo a la derecha) al objeto a como el producto del saber (S2) del otro y de dicho discurso en su efectuación. Este es el planteo de él con respecto al discurso del amo antiguo.
Acá (arriba a la derecha del lector) pone en el lugar del agente al saber, al S2 le da el valor del significante del saber, no porque sólo por lo que sepa o no, sino porque en definitiva es el que va a significar al S1. Y mientras la significación sirva, se la seguirá utilizando aunque no sea verdadera. La Verdad como significación, en la sociedad humana no existe. En el Discurso universitario:
S2 a
S1 $
El S2 va a operar desde el agente, va a producir a partir de un significante 1 S1 instalado en el lugar de la verdad sobre el otro (el otro, en posición y como objeto) y va a producir a un sujeto deseante, angustiado, tachado, partido, reprimido. ¿ Qué quiere decir esto? Muy sencillo, ustedes lo tienen en el ejemplo de hoy: hasta este momento ustedes son objetos de lo que yo digo. Hay alguno de ustedes que se deben estar aburriendo, por ejemplo la señora que era Licenciada en Historia se paró y se fue, no debe haber entendido de que hablaba, no le debe haber resultado interesante y se fue. Entonces, habrá algunos que estarán aburridos, otros estarán fascinados diciendo: “uh, mirá las cosas nuevas de las que está hablando de este tipo”, otros estarán: “¿cuándo la termina?”, otras estarán angustiados diciendo: “ yo no sé nada de eso ¿cómo voy a hacer para arreglármela con todo eso?”. En ese sentido están como objeto y en ese sentido son producidos como sujetos del inconsciente. Este es el discurso universitario, este discurso, les insisto, para Lacan funciona no sólo en la clínica. A los que somos psicoanalistas con los obsesivos nos pasa muchas veces eso, con determinados tipos de obsesivos, con los que nosotros nos sentimos en objeto. Y el obsesivo nos habla y nos habla y nos habla, y no sabemos cómo hacer para salir de esa. Pero, digamos, típicamente se ve en la universidad.
Por eso la universidad es un lugar de idolización de los profesores o de odio masivo contra los profesores. Ustedes ven que las universidades siempre están dando vueltas entre que desprecian al profesor o lo aman inconmensurablemente, o lo quieren echar,¿no? Pero, como les decía antes, también pueden estar dirigiendo una sociedad.
De ahí va al Discurso del capitalista:
De ahí va al Discurso del capitalista:
$ S2
S1 a
Y acá se arma el lío ¿por qué? En el lugar del agente él pone al sujeto deseante, en el lugar de la verdad al S1, o sea al significante que representa al amo. Les doy una pista en todos los discursos que ustedes vean escritos, donde del lado izquierdo (del lector) aparece el S1, este arriba o este abajo, son discursos amos. Hay una primer cosa que llama la atención: no hay una flecha que vaya, (como en todos los otros discursos) del lugar del agente al lugar del otro. No explicó Lacan porque lo escribió así. Hay una segunda cosa que llama la atención, mientras en todos los discursos lo que está en la verdad está sosteniendo, soportando a lo que está en el lugar del agente, acá la flecha va al revés. ¿Qué quiere decir? ¿ Qué lo que está en el lugar del agente está sosteniendo, soportando al S1? No, porque el S1 está abajo. ¿Qué quiere decir? ¿Sencillamente que cambiaron de lugar?, puede ser. Pero en concreto lo que ha ocurrido es que mientras las cuatro flechas planteadas de ese modo daban un modo de girar cada discurso, en todos igual, en este discurso eso se interrumpe; por la falta de esta flecha y por estas dos flechas apuntando hacia abajo. ¿Qué quiso decir con eso Lacan?, no es fácil de entender. El no lo explicó, cada uno de nosotros hace su propia apuesta, eso es lo que ustedes leerían si leen a Aleman, en fin, a los que les nombré antes. Otra cuestión: Lacan no escribió así de entrada los discursos, si ustedes empiezan leyendo “El reverso del psicoanálisis” por ejemplo, van a ver que estas dos flechas (las de los costados) no aparecen, sí el signo de la disyunción abajo. Estas dos flechas van a aparecer recién en Radiofonía. No recuerdo en que año lo dijo pero fue un año después, más o menos, no recuerdo bien. Y además en cierto modo aparecen matemas escritos al margen del librito en que editan Radiofonía y Lacan aclara que esos matemas los escribió Miller, auque al mismo tiempo dando idea de que él está de acuerdo con dicha escritura. En ella Miller le va interpretando los párrafos en los que Lacan va hablando, escribiéndole esos matemas a los costados.
¿Qué quiere decir con esto? Yo les digo lo que a mí me parece, pero antes de eso, a partir de este discurso me tomé la libertad, por ejemplo, de escribir este, que llame Del amo entre encausante y encausado:
S1 $
a S2
En este matema lo que pueden ver es un cuarto (¼) de giro hacia la derecha de lo que es el discurso del capitalista. ¿Cómo uno se puede autorizar o no a escribir un nuevo matema? Es todo un tema, Lacan de entrada fue tajante. De que eran sólo cuatro. Sin embargo, en un seminario que da paralelo a ese donde dice eso, en el mismo año, que se llama “El saber del psicoanalista”, dice que para que se pueda escribir un matema lo que no tiene es que desequilibrarse los lugares del discurso, o sea que a un lugar lleguen o salgan más de dos flechas. La otra casa que dice, que me parece que es la más importante (esta es importante también, porque sino efectivamente no habría discurso, se estaría marchando rápidamente a un desanudamiento general), la otra cosa que dice es que el discurso ese tiene que ser encontrado en la práctica social, eso fue lo que a mí me llevó a escribir este que llame “Discurso del amo entre encausante y encausado”. Este discurso tiene mucho que ver con ese paciente que les conté que de obrero había llegado a ser patrón de una PyME y con otro paciente que era hijo de alguien comercializador en una empresa y que había llegado a ser dueño de una empresa productora. Luego dicho hijo había entrado como recambio generacional. Lo que me encontré en estos dos pacientes, y van a ver la diferencia enorme con este tipo de discurso, es que tenían una relación directa con sus trabajadores. Mayor, menor, no importa, pero una relación directa. Lo más típico, por ejemplo, bueno él que venía de obrero y llegó a patrón, se imaginan, muchos de los que seguían trabajando en su empresa habían sido compañeros de él cuando él era obrero. Y el otro, el hijo del patrón, en algunas decisiones me planteaba: “¿cómo lo voy a echar a fulano? Que lleva 25 años en la empresa, que yo cuando era chiquito venía a la empresa a jugar y jugaba con él, que muchas de las cosas yo aprendí en la empresa las aprendí de él”. Se dan cuenta que la relación es muy directa, tiene en ese sentido cierto parentesco con lo que era la relación feudal, que ustedes todavía la pueden observar en algunas provincias argentinas, donde la relación del amo con sus trabajadores es bastante directa.
Eso que parece un detalle sin importancia si uno no lo piensa, sin embargo genera un tipo de vínculos que no genera el Discurso del capitalista. Este discurso compete más a, es más típico de esas grandes corporaciones financieras que muchas veces ni siquiera tienen dueño sino que son fondos de inversión, por ejemplo las AFJP, o los fondos de inversión de los bancos. En esas los dueños de las acciones son casi anónimos. Los que dirigen esas empresas son el personal ejecutivo que, al mismo tiempo que puede mover la empresa de tal forma que hasta puede trampear a sus propios patrones, digamos, ejemplo típico fue Webcam, ahora en EE.UU., no tienen relación con la masa de trabajadores de la empresa. Creo que, se haya dado cuenta o no Lacan, ( a partir de acá es todo un invento mío), el que él no haya puesto esta flecha (se refiere a la horizontal superior en el Discurso del capitalista) una de las cosas que indica es eso: que no hay una relación directa entre el amo y el trabajador. Las relaciones pasan a ser indirectas, por ejemplo del S1 al S2, que representa al trabajador, pero del S1 no como agente y lo que está en primer plano es, en el lugar del agente, el sujeto como puramente deseante. Alrededor del tema del deseo justamente Lacan tuvo sus idas y vueltas, porque en el seminario de la ética está muy embalado con todo el tema del deseo, se mete con el asunto de Antígona y llega, digamos a idealizar de tal modo el deseo que toma al acto de Antígona y de a pesar que en ello le iba la vida y que iba contra todas las leyes del la ciudad, buscó a su hermano para enterrarlo, con lo cual efectivamente le fue la vida. Pero pasado un tiempo, el de La ética debe haber sido algo así como 1960, en el seminario de los Cuatro conceptos, 1966, si no recuerdo mal o sea unos seis años después, Lacan hace toda una reflexión sobre el tema del deseo puro. Uno podría decir que el de Antígona fue un deseo puro que llevó hasta el final, le importó un bledo lo que le pasara a ella y lo que le pasara a los demás y las leyes de la ciudad y todo eso.
En cambio, en los cuatro conceptos, Lacan termina planteando que el deseo puro a lo que lleva es al holocausto, al sacrificio en pos de un dios oscuro. Nos está hablando del holocausto nazi ahí Lacan. Uno podría decir: el deseo puro era el de Hitler, y el deseo puro llevó al extremo, a la extrema crisis de civilización que significó la Segunda Guerra Mundial, pero no sólo como guerra que a eso lamentablemente estamos acostumbrados los seres humanos, sino como holocausto en el sentido del intento de eliminar absolutamente una etnia. Entonces fíjense que para el que dirige una de esas corporaciones echar quinientos obreros o quinientos empleados y obreros, y no echarlos, no es ningún problema desde el punto de vista afectivo, es simplemente un problema de números, como diría Cavallo. Se acuerdan ustedes Cavallo diciendo: “ Ramal que da gancias sigue, ramal que da pérdidas: cierra”
- Intervención inaudible.
No, hubo un dicho de Cavallo, que fue muy importante; lamentablemente no lo tengo guardado eso, escrito bah, por ahí en algún lugar está porque me referí a eso en algún artículo, donde él tomaba como nudo del funcionamiento social la eficiencia, en ese sentido hay una diferencia para los economistas entre, acá hay un economista, creo que sabe mucho mejor que yo sobre eso, hay una diferencia entre eficiencia y eficacia, ¿verdad? La eficiencia es lo que da mayor ganancia a menor costo, más o menos ¿es así? Entonces a Cavallo no le importaba la eficacia, en el sentido de que el ferrocarril era una red que podía perder en una serie de lugares pero que estaba sosteniendo una modalidad de la comercialización de la producción nacional al interior del país y al exterior del país inclusive, pero sí la eficiencia. Entonces ahí fue cuando él dijo, yo no recuerdo estricta la frase, pero algo así como “ramal que no da ganancia cierra y ramal que da ganancias se mantiene en pie” y ahí fue ese desastre que ustedes van ahora por muchos lugares de la Argentina donde encuentran pueblos fantasmas, donde quedan 20, 30 viejos viviendo alrededor de una plaza, de una vieja estación de ferrocarril, prácticamente desaparecida. Para aquel paciente mío, hijo de un patrón y que se había criado de chiquito con los obreros de su fábrica, o para el otro que había sido compañero de ellos, cuando vino todo el período del llamado primero reciclamiento, modernización, y finalmente reingeniería industrial, todos nombres para decir hay que adaptar la empresa a las modernas tecnologías que permiten producir con mucho menor cantidad de mano de obra mucho mayor cantidad de producto, entraron en una crisis que no se podían imaginar, partía el alma verlos. Uno de ellos, el más joven, finalmente se adosó a lo que venía y salió relativamente, como pudo. El otro no sé, hace tiempo que no lo veo pero tenía la empresa al borde de la quiebra. En cambio estos (señala el matema del Discurso del capitalista) agarran y por ahí compran una empresa, le hacen un proceso de reingeniería, le mejoran la relación entre costo y beneficio y la venden a un precio mucho mayor de lo que la habían comprado. En estos (señala el matema Del discurso del amo entre encausante y encausado), al mismo tiempo que busca despertar o mantener el amor hacia él por parte de sus trabajadores, queda atrapado por esa misma posición de despertar el amor entre sus trabajadores. Entonces estos (entre encausante y encausado), en general, están identificados a una rama de la producción, por eso tienen un significante que los representa en el lugar del agente, como pasaba como con el amo antiguo. El amo antiguo también era el señor dueño de las tierras en tal lugar, con tal tipo de producción agrícola. Este puede ser el señor textil que produce tal tipo de género para tal tipo de temporada, que sé yo, no importa.
En cambio estos (Discurso del capitalista), lo que observan es que van cambiando, van dejando de ser propietarios en una rama de producción y se pasan a otra rama de producción más o menos como si cambiaran de zapato, lo mismo, porque en realidad a ellos les importa un bledo la producción. Pero no estoy hablando en un sentido, a ver: estoy un poco pasional evidentemente, y dicho así le quito tal vez el valor que tendría que tener de estructura formal del proceso ¿no?. Ellos lo único que persiguen es la mayor ganancia. La familia Ford, supóngase, no perseguía sólo la mayor ganancia, por supuesto que buscaba la mayor ganancia, pero además buscaba ser la industria de punta en el terreno automotriz en el mundo y para ellos el orgullo era que eran “los Ford” ¿verdad? Estos (Discurso del capitalista), el grupo Excel es un grupo típico, acuérdense que la cabeza del grupo Excel acá en la Argentina era Yabrán, no tienen puesta la cabeza en la producción, tienen pueden puesta la cabeza en la reproducción de dinero nada más. Eso hace, a mi modo de ver, que este tipo de discurso tiende a producir efectos disgregadores muy grandes en la sociedad. Es en lo que nosotros los argentinos, lamentablemente, hemos estado a la vanguardia durante toda la década del noventa, hasta ahora. Y vamos a ver la que nos espera. Acompañamos algunos países del sudeste asiático, en realidad nos anticipó Inglaterra, no sé si ustedes recuerdan esa película “Rif. Raf”, o la otra película “Todo o nada” o “Full Monty”, en las que aparecen los efectos que en Inglaterra había producido esa mentalidad capitalista. No nos engañemos, a Inglaterra la salvó el descubrimiento y la puesta en producción del petróleo en el Mar del Norte, sino estaban acabados, a menos que cambiaran de timón rápidamente. Bueno. Entonces con este discurso (el del capitalista) pasa esto.
Sintetizo y termino: lo que les quiero decir es que según que modalidad de vínculo social se produce, lo cual queda expresado en el tipo de discurso que sostiene a ese vínculo social, es también lo que va pasando en el seno de las sociedades. Al mismo tiempo, por supuesto, tengamos claro de que nunca hay una unicidad de vínculo social, una unicidad de discurso en ninguna sociedad. Ni siquiera en las sociedades más stalinistas o más fascistas, lograron producir una unicidad de discurso al interior de sus sociedades. Por ejemplo me acuerdo, que el gran problema que se planteaban los soviéticos y los polacos allá por el año 70, más o menos, era que no lograban en el campo pasar de la propiedad privada a la propiedad colectiva y mucho menos de la propiedad colectiva a la propiedad estatal. O sea, con todo el peso que en eso países tenía ideológica, política, económica, y militarmente la ideología dominante de estatizar todo, sin embargo no lograban la unicidad de discurso. ¿ por qué?, acá viene el planteo de Laura y ahí termino Porque no hay discurso, y en ese sentido sí discrepo con Aleman.
Aleman plantea que este es el discurso de la perversión y que en este discurso queda entonces encerrada la posibilidad de que continúen los giros de discursos. Yo creo que eso es observar la relación de discurso como un efecto de complementación, digamos, entre los dos lugares. Nunca hay efecto de complementación, sino efecto de suplementación, que es distinto. O sea, siempre van apareciendo fallas, esas fallas que van apareciendo, cuando van tomando determinado peso van produciendo determinado tipo de acontecimientos, que los modernos, ya fuera del marxismo, del liberalismo, de las utopías científicas, pensaban que nos llevaban en un desarrollo continuo y hacia delante. No. Lo nuevo que puede aparecer puede llevar a una sociedad hacia delante o la puede llevar hacia atrás y en eso hay multiplicidad de experiencias. Lo que sí, ningún discurso logra sostenerse eternamente, siempre en algún lugar va a aparecer lo real metiendo la cola para producir la falla y para obligar a que todo el aparto de discurso se ponga en funcionamiento otra vez, para tratar de dar cuenta de esa falla que apareció en su propio desarrollo. Bueno, paro acá.
- Roberto Vechiarelli: Bueno, algunas cositas que se me fueron ocurriendo ¿no? Con respecto, algunos mejor son disparates, pero no importa, me animo... De repente un discurso universitario, sí yo me había dado cuenta que te habías equivocado y ahora lo corregiste, pero (ya es un clásico), ahora está bien. Pero el discurso universitario bien planteado como que hay un saber del lado del agente que opera sobre el objeto. Lo significante amo está en el lugar de la verdad y produce, de alguna manera, una división subjetiva. Se manifiesta de muchas maneras: una del saber mismo como cuestionamiento, por eso, de alguna manera, puede cambiar también cambiar el discurso universitario, porque hay un cuestionamiento de ese saber, desde la división de los mismos cuestionamientos de los alumnos en la división de los sujetos. Y me preguntaba también si esa división no tuvo que ver también con que esa caída, con que después, que era lo que vos no me (inentendible) en algún momento, pasara otro discurso hegemónico pero el discurso del capitalista. Pero en el medio, viste cuando vos te equivocaste, porque las equivocaciones ya sabemos que son fructíferas ¿no? Viste que cuando vos habías puesto en ese discurso en el cual estaba en el lugar del otro, si querés escribilo, que está en el lugar del otro el sujeto dividido y en el lugar de la verdad el objeto (S2/S1------$/a . Vos sabes que yo a ese discurso, por lo menos de los que me acuerdo que vos nos hayas enseñado, ¿no? No sabría cómo llamarlo y estaba pensando que ¿sabés a que se parece ese discurso? Parece que es el discurso del falso maestro, del maestro puesto a comerciante o incluso del psicoterapeuta (estoy delirando un poco) porque fijate que hay alguien que tienen un significante amo en lugar de la verdad, que opera desde un saber pero opera sobre el otro como faltante, como castrado y produce un producto que de alguna manera vuelve al lugar del que produce el saber ¿no?. Yo estaba pensando, delirando un poco, si no es el discurso que, que sé yo, hacen guita con la medicina, digamos, el universitario que ostenta el saber pero con fines más bien lucrativos, digamos. Esta es una cosa que se me ocurrió en el camino. La otra cuestión que me interesó cuando vos hablabas de lo que se ve en lo real. ¿vos sabés que yo leía en un libro el otro día, en un libro no psicoanalítico, algo que vos comentaste en la delincuencia actual como estos delincuentes... es como si se les diera, estuvieran muy cerca de ser puro real. ¿no?, tuve un caso hace poco donde a un dueño de una clínica lo asaltan en una barrera para robarle el coche y directamente ya entran a intimidarlo, no que lo amenazan, entran baleando, lo hieren, con tanta suerte que lo hieren en un lugar muscular, en la ingle pero sin tocar ninguna arteria importante, el se tira al suelo más bien para hacerse un poco el muerto, pero lo gracioso del caso es que si el objetivo era llevarse el coche, los tipos seguían tirando tiros, incluso tirando tiros contra el coche que se querían llevar, y no sé para que les sirve un coche agujereado. Pero voy a esto, vos sabés que en ese libro decía que en una época, los que estudiamos hace algunos años en esto ¿te acordás cuando, sobre todo por la diferencia de la Ego Psycologie También por Pichón Riviere y demás se hablaba de la salud como la adaptación activa del individuo a la realidad. Después Lacan va a cuestionar eso y va a plantear que la adaptación es la adaptación, en realidad, a la castración. Yo leí en ese libro algo muy interesante, me pareció muy interesante, que es que no se puede pensar ahora eso, de ninguna manera, de salud como adaptación a la realidad porque en realidad, realidad, la realidad es la des-adaptada, en el sentido de que es tan cambiante, tan irrruptiva que es imposible adaptarse a ninguna realidad. Si la realidad, nosotros como psicoanalistas sabemos que... (cambio de cinta)
- la otra cosa que se me ocurría es con el discurso del amo entre encausante o hablabas de las... y bueno, me pregunto, ¿no es el discurso de las PyME´s?
- Horacio Gonzalez: Bueno desde la economía ¿no? No sé si voy a hacer bien las preguntas pero quisiera saber en el último matema que se dibujó ahí, digamos por lo que él había dicho también, este compañero Roberto, S1 y S2 sería paciente y terapeuta, psicoanalista y paciente, y el a acá sucedía el registro imaginario y el registro simbólico y así como el a en el matema del amo antiguo, el a sería el excedente o plus producto o plus valor como a lo mejor también lo quiso decir Lacan por lo que escuché aquí, ahora, y también en el discurso del capitalista sería también plus valor, pregunto entonces si el a sería el registro imaginario y el simbólico en el último matema, como producto, como algo que se produce, yo lo entiendo así, no sé si está muy mal lo que digo, disculpen.
- Sergio Rodriguez: Bueno con respecto a lo que traía Roberto, prácticamente no me voy a referir porque primero: lo que planteas acerca de este discurso yo tendría que ponerme a pensarlo, me resultó interesante la idea. Yo lo que quisiera subrayar de lo que traía Roberto es que hay un tema que hemos tratado en el módulo anterior y que vuelve a aparecer por vos y que por ahí es un gran tema al que todavía no le damos la entidad que debería tener, nadie me parece, excepto algunos que están pensando el tema de la postmodernidad, que es que está pasando con el tiempo, qué está pasando en la relación entre el tiempo y el sujeto, ¿no? Y que es un tema mucho más grave de lo que en general se supone, y que creo que tiene bastante que ver con esto que planteabas vos en relación a esa realidad que cada vez es menos realidad, digamos, y más real ¿no? Con respecto al planteo que traes, justamente yo creo que el inconveniente con que se encontró Lacan una vez que inventó sus matemas es que no tenía como plantear o por lo menos el planteo le quedaba absolutamente deshilachado en relación a cómo articular los elementos de cada matema y los lugares de cada matema a lo real, lo simbólico y lo imaginario ¿no? Creo que eso es lo que hace que después del año 72, más o menos, se meta más en el tema de los nudos y que finalmente, cercano a su muerte, diga yo les dejo las dos cosas ¿no? Él, por ejemplo, al S2 como significante del saber, lo va a ubicar más del lado de lo imaginario. ¿verdad? Y al S1 como significante del sinsentido lo va a ubicar más del lado de lo simbólico, en el sentido de que estaría abierto a muchas combinatorias posibles, el S2 quedaría más cerrado a un sentido, por eso lo plantea así. Pero tiene sus guai eso, porque por lo menos en el discurso del amo antiguo, supónganse, el dice que el amo no sabe nada, que el que sabe es el esclavo. Pero Lacan tenía la costumbre, especialmente cuando empezaba a elaborar un tema, de ser, a mi modo de ver, excesivamente tajante en algunas definiciones, ¿no?, porque creo que no es cierto de que en ninguno de los regímenes de amo que ha habido el amo no ha sabido nada y el trabajador ha sabido. Es decir que es cierto, vos como economista la debes conocer bastante, o más que los economistas los especialistas en recursos humanos lo trabajan mucho por el lado de capacidad de decisión, ese es el término que ellos usan, Lacan dice el amo lo único que sabe es indicar, pero saber indicar significa que detrás de esa orden, de esa indicación que se da, hay todo un saber más o menos conciente, no importa, que está permitiendo a alguien tomar esa posición. Por lo tanto el S1 es el significante sin sentido, sí, hasta un límite. ¿El S2 no es combinable? Sí es combinable, es más, el S1 puede atravesar al S2, puede agujerearlo, puede ponerlo en cuestión y obligarlo a combinarse.
Todo el trabajo de Sócrates en el cual se apoya mucho Lacan en “El reverso del psicoanálisis” de extraer el saber que hay en el esclavo. Es todo un trabajo, si uno lo va siguiendo a través de las preguntas, en realidad de agujerearle la suposición de no saber al esclavo, es un saber, si yo supongo que no sé, creo saber que no sé ¿verdad? El trabajo de Sócrates era ir agujereando eso para que fuera emergiendo el saber que en el esclavo había. Pero eso también qué nos indica, que en Sócrates había un saber hacer para hacer emerger ese saber en el esclavo. La pregunta tuya que a los psicoanalistas les puede parecer, y vos tenés miedo que ocurra eso, que tu pregunta esté fuera de lugar, sin embargo es una pregunta bastante, es muy razonable, en el sentido de que se, no lo voy a tomar esta noche, pero hay algunos discursos relacionados al acto del analista donde yo pongo el S1 del lado, yo no me acuerdo bien como era ahora, pero no, el S2 pongo del lado este, pero efectivamente hay todo una parte del trabajo del analista muchas veces que significa, que consiste en hacerse el estúpido, en hacerse el que no entiende. Una paciente venía con sus dilemas de amores, fuertes dilemas de amores, y además realmente, donde por un lado la pasa muy bien y por otro sufre mucho, alrededor de esas cuestiones y toda una parte de mi trabajo consistía en manifestarme como que yo no entendía. Por un lado era cierto que no entendía, pero por otro lado me hacía más el que no entendía que lo que no entendía. Podía ahí estar jugando de S1 ahí y ¿para qué? Para hacer como fue apareciendo después del lado de ella, que fuera apareciendo todo un saber del lado de ella, donde finalmente... fue muy divertido, tanto para ella como para mi, es una paciente que hace un tiempo que trabajamos ya, nos tenemos mucha confianza. Y hasta nos reíamos juntos en determinados momentos, porque toda la queja inicial de ella era que ahora que se había enamorado en serio de un tipo, el tipo de golpe se había borrado y se había ido de recorrida de minas durante una semana. Y después había aparecido otra vez y ella se había enojado mucho, había armado un quilombo infernal.
El tipo se había mostrado culpable, que ella tenía razón, no sabía que le había pasado, y que sé yo ¿no? Entonces medio me venía a preguntar a mí que le había pasado al tipo. Y le digo, mirá yo sobre eso puedo sospechar, pero decir... Pero lo que sí me parece que es una pregunta interesante es qué te pasa a vos, que con cada tipo que te vinculás siempre son picaflores y después te venís a quejar. Entonces ella sigue contando sus historias y termina contándome que en esa semana que este tipo se borró ella se encandiló con otro en brazos del cual está a punto de caer. Y entonces le digo: bueno, parece que no te sólo te gusta que ellos sean picaflores, sino que a vos también te gusta andar picando flores ¿no? Pero para todo eso me tuve que hacer el estúpido durante un buen rato. Además no sabía donde iba a terminar todo eso. Ahora, por eso digo que lo que vos te preguntas tiene cierta lógica, pero en realidad Lacan lo va a escribir de esta manera (a/S2----$/S1). Lacan lo que va a plantear en el tema del objeto que vos planteas es complejo, muy complejo y que es mejor acomplejarlo y no simplificarlo. ¿por qué? Porque como él habla durante bastante tiempo del objeto a como no especularizable, como no representable, como el objeto causa de deseo porque en realidad es lo que estaría en el lugar de la falta de objeto, entonces mucha gente se quedó pegado a eso, pero en realidad es más complejo. Él, en el nudo borromeo coloca el objeto entre las tres arandelas, o sea que el objeto va a tener una cara real no especularizable, no representable, que funciona como un vacío que causa el deseo, etc., pero va a tener una cara simbólica donde va a estar representando y una cara imaginaria donde va el vacío va a estar vestido.
El objeto nunca se nos aparece desnudo, porque ojo si a mí (uy: tengo a mi esposa acá, tengo que hablar con cuidado). Si aparece una mina absolutamente desnuda delante de un hombre, no es que se aparece desnuda ante ese hombre, se aparece vestida con su piel, con sus labios, con sus ojos, con su cabello, con su perfume ¿verdad? Que se nos apareciera efectivamente desnuda tendría que estar despellejada, descarnada digamos, y ese objeto no lo soportaríamos ¿verdad?
- (intervención inaudible)
- Entonces lo que Lacan nos insiste a nosotros como psicoanalistas, es que tenemos que jugar en este lugar (a como agente) Este lugar que entonces es complejo, porque hay algunos psicoanalistas lacanianos que tomando un planteo de Lacan de que como en el Bridge, el psicoanalista tiene que tomar el lugar del muerto y que además tiene que hacer semblante de objeto a, se hacen entonces verdaderamente los muertos. Te quiero decir: son esos que después vienen y se te quejan los pacientes diciendo: “no, estuve cuatro meses yendo a un psicoanalista que no me dijo una sola palabra en los cuatro meses”. No, eso no es trabajar de psicoanalista, eso es boludear. Uno va a tener que ir jugando, captando que le está pasando (esta muchacha que les relaté era muy divertida toda la situación porque, a ver, ¿cómo hago? Este muchacho con el cual se encontró tan metida tienen uno de mis nombres. Entonces primero: era evidente que ese muchacho en cierto modo me estaba representando a mí, pero yo a la vez tengo ese mismo nombre, que es uno de mis nombres, es el nombre de un ex esposo de ella. Entonces si yo me creo de que ella anda detrás de ese hombre porque le gusto yo, soy un tonto. Sino que en todo caso puedo pensar que una de las razones que la trajo a ella a analizarse conmigo es que yo tenga el nombre de aquel ex esposo y que por lo tanto se armaba un “menaje a trois” de hombres, digamos, donde habemos tres hombres con el mismo nombre, que hemos adquirido un valor libidinal para esa muchacha. En ese sentido yo como objeto, simbólicamente estoy representando otra cosa.
Pero al mismo tiempo yo con ella me manejo de un modo, porque ese juego que le hice tipo socratiano, digámosle además en porteño y en canyengue, porque también ella tiene una modalidad, digamos, que al mismo tiempo que es una intelectual, no es una intelectual ¿cómo decir? Una intelectual más bien de estas que les gusta jugar a ser de barrio, además de provenir del barrio. Entonces yo me tengo que vestir (vestir no en el sentido de la pilcha sino de cómo hablo, de una manera determinada con ella, tanto en como hablo, como gesticulo, etc) pero todo eso lo único que está encubriendo es el sufrimiento de ella que es por no lograr encontrar aún ese objeto que quede en el lugar de la fantasía que sostiene su deseo y con el cual ella pueda vivir su historia de amor. Entonces, Lacan nos plantea jugar en este lugar, en relación al sujeto sufriente que está en el lugar del otro a través de nuestras interpretaciones que son sobre la base del saber psicoanalítico pero que van a producir un nuevo significante que es la nueva interpretación. Ulloa le llama a eso “lo impensado que va a disparar lo impensable” que que será el nuevo significante que reiniciará la ronda.
- Laura Lueiro: Porque vos te fuiste para el lado del discurso del analista, pero lo que yo entendí que planteaban Roberto y que en ese sentido seguía Horacio, tiene que ver con una alteración en el discurso del universitario, que es lo que Roberto dice. Que por un lado, digamos, bueno, si en relación al del amo Lacan se da el gusto de invertir de lugar agente por qué no Vechiarelli podrá invertir el universitario en el lugar del otro, o sea que tiene validez.
- Sergio Rodriguez: Tiene validez si lo encontramos en algún lugar realidad social.
- Laura Lueiro: Eso es lo que ellos estaban intentando hacer y vos te fuiste para el lado del discurso del analista, pero yo retomaría lo que plantearon ellos dos porque en el lado del discurso universitario, esto que produce fascinación o tensión de agresividad es que el conjunto de los significantes quedan del lado del agente, toda la cadena significante. Por lo cual del otro lado se produce fascinación o malestar, y que en el lugar de la producción sujeto barrado ahí en el discurso universitario tiene más que ver con el malestar y con el síntoma que con el deseo, en el universitario. ¿por qué me pones esa cara? Lacan lo plantea por el lado del repetidor, el de la cita, el de la formulaciones de tesis, el que nunca está a la altura del maestro, produce síntoma, es la falla del discurso esa.
- Sergio Rodriguez: Lo que pasa es que el síntoma nunca es...
- Laura Lueiro: Bueno, por supuesto. Depende en que lugar esté el sujeto barrado va estar más del lado del deseo o más del lado del síntoma, cuando en el discurso de la histérica está el lugar agente está más del lado del síntoma que del deseo. Bueno, en este discurso que inventa Roberto ( yo hago macanas y los demás hacen mérito con mis macanas, no importa) es interesante porque si del lado del agente queda el saber total, totalizado en el sentido imaginario porque está S1 y S2 de un solo lado y del lugar agente y en relación al otro ponemos al síntoma, es lo que Roberto está diciendo que son todos aquellos cerrados que intentan resolver el sufrimiento humano produciendo un plus que bien podría entenderse como ganancia para el amo, que está en el lugar de la verdad, psicoterapeutas, médicos, yo pensaba también en manosantas, curanderos, sectas, iglesias, esto que... pero dirigido al sufrimiento, más por el lado del síntoma que por el lado del deseo.
- Sergio Rodriguez: Sí, yo esa parte de lo de Roberto, por eso le dije que me parecía interesante, que era para pensarlo, que no lo respondía ahora. Lo que vos planteas, en general estoy bastante de acuerdo, en lo que por ahí me diferenciaría un poco, Roberto, de lo tuyo es que por ahí no tiene que ver solamente ni principalmente a veces con el dinero, otras veces sí. Efectivamente, pueden entrar a jugar otra cantidad de elementos de ganancia, digamos.
- Roberto Vechiarelli: El clásico Racing – Independiente, el discurso universitario, bueno, que es un discurso, sobre todo digo por los que no son psicoanalistas, que no es solamente de la universidad en sí, incluso de algunas personas que se colocan en el lugar del saber, como políticos, por ejemplo, como un medio, bueno, pero después para acceder a otra posición y me estaba acordando, con esa estructura, de una propaganda de Macri, dice, ustedes la habrán visto: Yo soy empresario y sé como crear emprerio, ¿qué dije? “crear un imperio” (risas) Bueno, replay. “Yo soy empresario y sé como crear EMPLEO y combatir la delincuencia” bueno, lo que cae del lado de la producción, bueno, ya lo vemos ahí, no hace falta aclararlo. Aparte del acto fallido...
- Fernando Escudero: En el matema del capitalista hay dos aspectos que no abarcarían la realidad actual y es el siguiente: el tema de la plusvalía, hoy vuelve de alguna forma al “sujeto dos” porque la plusvalía viene porque la industria moderna necesita producir en escala, o sea grandes cantidades, vos hablabas en el discurso del amo que la plusvalía es lo que se producía en exceso, hoy la producción en exceso es prácticamente un requisito de la industria moderna, producción en escala para poder bajar costos y hacer accesible la mercadería cada vez a más personas. Eso por un lado, o sea que no queda solamente en el S1, vuelve a S2 a través de acceso de una producción más variada y a mayor cantidad. Y después que la relación de S1 y S2 en la empresa moderna también no es de tal aislamiento, porque vos fijate que las empresas modernas hoy lo que se gasta en capacitación del personal para hacerlo más eficiente implica hasta un contacto de lo que es la empresa con el obrero, una relación de compromiso en su saber, porque existe grandes esfuerzos de capacitación, existe atención a demandas médicas, o sea está todo instrumentado mucho desde el punto de vista de la relación S1, S2, y después que el capital hoy es prácticamente el equipo que suplanta la acción de S2, o sea hoy el producto, el plus valor, prácticamente, en mayor proporción, el equipo industrial que es capital acumulado, o sea que esa ecuación la veo como insuficiente para explicar la realidad de lo económico hoy, del fenómeno industrial y económico.
- Sergio Rodriguez: Por eso yo traté, Escudero, de insistir bastante sobre varios discursos en funcionamiento siempre en una sociedad y no uno solo, y cuando me refería al del capitalista, me referí como hegemónico inclusive aclarando que no era porque fuera el más amplio en cantidad de posesiones sino por cómo funcionaba y lo distingo del tipo capitalismo que vos planteas. El tipo de capitalismo que vos planteas tiene que ver más con el discurso de la universidad en todo caso, y estaría de acuerdo, subscribiría a varias de las cosas que vos decís, otras habría que pensarlo, pero no es este discurso. Este discurso, insisto, son los fondos de inversión, son las bolsas, son los bancos en su aspecto más concentrado y financiero, digamos, ¿no? Ahora, vos planteas algo que me parece que es la gran paradoja que se le ha planteado a este discurso en la sociedad actual y que ha reventado (ellos hablan de burbujas que revientan, vieron) y que ha reventado en este comienzo del siglo veinte, que es todo lo que vos decís, desde el punto de vista de la capacitación del personal, la atención del personal, todo eso era cierto y que la ampliación de la producción le exigía un mayor mercado en el cual colocarla, todo eso era cierto, por supuesto, están compelidos a producir más. Además están compelidos por un lado por lo que les está pasando en el terreno de la producción, por otro lado lo que les pasa en el terreno de la rivalidad capitalista, comercial, etc., de la competencia, digamos, pero cayeron en una trampa, que ellos mismos me parece que no se dieron cuenta, bah, me parece que lo están estudiando ahora, a ver cómo salen de esa.
La trampa fue la introducción de la tecnología, y cuando digo la tecnología no me refiero sólo ya a informática, transporte, telecomunicaciones, transformaciones de la metalurgia, utilización de determinados tipos de materiales no ferrosos, etc., sino inclusive de la tecnología comercial. En el sentido de que entonces pasaron a una situación donde producen cada vez mayor cantidad de mercancía con menor cantidad de mano de obra. Yo tengo un ejemplo muy sencillo, que es el de los supermercados. Los tipos con el invento del changuito, que se dan cuenta que lo podrían haber inventado hace 600 años, digamos, pero con el invento del changuito ponen al comprador a trabajar gratis para ellos. Por supuesto que es relativo lo de trabajar gratis porque obviamente es para poder venderles más barato, pero con eso eliminan una masa de empleados muy grande, ¿verdad? Bueno, así les está pasando en todas las ramas de la producción, entonces lo que les está ocurriendo, que es lo que tiene fuertemente que ver con la sociedad de exclusión, lo que les está ocurriendo es que arman una sociedad con una cantidad de marginados de la producción muy grande, en EE.UU. están en un 6,2% de desocupación, EE.UU. ¿verdad? Ahora, ¿qué ocurre? Como el capitalismo es voraz por definición, no puede serlo de otra manera, no es una cuestión de que sean más buenos o más malos tipos sino que la misma competencia los lleva a tener que entrar en eso o sino morir. Entonces les ocurre de que al haber dejado caer por fuera de la participación en la producción una cantidad grande de la masa, la parte que ha quedado produciendo (que es lo que vos decías antes) va aceptando cada vez más acotaciones y limitaciones a sus demandas sociales, ¿por qué? Porque el temor es caer acá (a en el discurso del capitalista), es caer como resto. Entonces que esto que a ellos los pone contentos en lo inmediato, porque reducen los costos para ampliar los beneficios, en un mediano plazo, ya les está pasando, les está liquidando toda una parte importante del mercado. Ahora están tratando de ver cómo salen de eso. Por ejemplo, tratan de salir de eso a través del mercado de bienes suntuarios.
- (intervención inaudible)
- Justamente para poder vender, digamos. Pero están buscando salidas, como por ejemplo aumentar la producción de bienes suntuarios, ustedes ven la publicidad de los automóviles, por ejemplo, no van a ver ninguna publicidad de automóviles chicos, en general lo que ven es la publicidad de automóviles carísimos, pero eso también se les acaba. Eso también se les acaba, entonces ahí aparece algo siniestro (que nosotros lo sacamos en televerdades y ahora, hace poco, leí un articulo completo sobre el tema escrito por un periodista). A todos les pasó desapercibido que Bush en la entrevista con Kirchner donde éramos todos amigotes, todo bárbaro, fantástico, nos vamos a querer mucho, cuando se va le regala un libro, un incunable. ¿qué libro? El libro clásico de Malthus, donde, ustedes saben , Malthus fue el primer teórico que planteó como salida para el planeta la liquidación por épocas, de una gran cantidad de millones de seres humanos. Vía las pestes, las guerras, etc.,etc. Ese es el librito que le regaló Bush a Kirchner. A buen entendedor, pocos libritos. Bueno, vamos a parar por hoy y la seguimos el lunes 25.
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